No es la primera vez que se muestra la influencia del Greco sobre Picasso, ni tampoco la primera vez que se cuestiona si el pintor de Creta fue el pionero del cubismo o bien si el artista malagueño fue el último ‘Maestro Antiguo’. Sin embargo, sí es la primera vez que ocurre en nuestro país. Esta charla entre el Greco y Picasso que Museo del Prado exhibe en Madrid hasta el 17 de septiembre, se pudo ver el pasado año en el Kunstmuseum Basel, pero en esta ocasión la yuxtaposición de obras maestras de ambos artistas forman un diálogo aún más revelador.
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Más de cuatrocientos años separan las obras del Greco y Picasso, ¿cómo puede ser que haya tal conexión entre ellos? De joven, el artista pasaba largas horas por los pasillos de El Prado y cuentan que se enamoró del «halo de modernidad, singularidad y variedad estilística» de el artista cretense. Un influencia que se aprecia en el periodo azul incorporando a su obra figuradas alargadas y la paleta de tonos oscuros característica del Greco.
Dos artes muy diferentes y, sin embargo, con el denominador común del volumen, el color, la composición, el espacio y la luz. La muestra de la exposición ‘Picasso, el Greco y el cubismo analítico» se compone de 12 pinturas que se van interrelacionando.
- ‘San Pablo’ y ‘El aficionado’
- ‘San Juan Evangelista’ y ‘Hombre con clarinete’
- ‘San Bartolomé’ y ‘Acordeonista’
Carmen Giménez, comisaria principal de la muestra, afirma que «el Greco fue el primer amor de pintor español, y un primer amor siempre tiene frescura». Explica que Picasso «supo ver en el pintor de Creta un acto de rebeldía cuando abocetaba lleno de energía».
El Greco más allá del periodo azul de Picasso
Responsables del museo del Prado puntualizan que «aunque casi todos los autores coinciden en limitar la influencia del Greco a la juventud de Picasso, esta exposición plantea que fue mucho más profunda y duradera, ya que fue crucial para el desarrollo del cubismo y, en especial, para la fase del cubismo analítico». Esta corriente se caracteriza por la fragmentación y descomposición de la forma en pequeños detalles analizados y reordenados en una nueva composición.
Documentos que muestran la influencia del Greco
Como gran novedad, la exposición incluye los documentos testimoniales que resaltan la relación de Picasso con el Museo de El Prado, «una relación que comenzó en sus años como copista y finalizó con su nombramiento como director».
«Sabemos que Picasso pasó más tiempo en el Museo del Prado copiando a los grandes maestros que en la propia Academia de Bellas Artes de San Fernando», señalan desde El Prado. En algunos de los dibujos del pintor malagueño se pueden leer frases escritas por él como ‘¡Greco, Velázquez, inspirarme!’.