Cada vez más oímos hablar sobre el coolsculpting, un tratamiento no invasivo alternativo a la liposucción que reduce la grasa localizada sin cirugía, sobre todo de aquellas zonas que, a pesar del ejercicio y una dieta saludable, se resiste a desaparecer. Pero hay muchas cuestiones que aún desconocemos, ¿es apta para todos?, ¿cuántas sesiones se necesitan?, ¿en qué zonas se puede hacer?. Para responder a todas estas dudas hemos hablado con Paula Dafonte, directora de la Clínica Marfila.
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¿Cómo funciona el coolsculpting?
Dafonte nos explica que «elimina la grasa y remodela el cuerpo. Este sistema se basa en la criolipólisis médica, es decir, emplea el enfriamiento controlado para detectar y destruir únicamente las células grasas de forma definitiva».
¿Se administra anestesia?
«No es necesaria anestesia, ya que el proceso no es doloroso. De hecho, mientras el paciente está realizando el tratamiento, puede estar tranquilamente viendo una serie, leyendo un libro, escuchando música…», nos explica Dafonte, quien está al frente de Marfila, una clínica de referencia en Medicina Estética y Dental en Salamanca.
¿Para quién está dirigido?
«Para todos aquellos pacientes con grasa localizada, que a pesar de llevar una vida saludable, tienen grasa acumulada que no consiguen eliminar».
¿Cuánto dura la sesión y cuáles son los tiempos de recuperación?
«En Marfila realizamos un diagnóstico personalizado para cada paciente, en el que evaluamos la cantidad y tipo de grasa que el paciente quiere eliminar. El número de sesiones de CoolSculpting depende de ese diagnóstico personalizado y de la zona a tratar. Aproximadamente cada sesión dura entre 40 a 75 minutos».
¿Cuántas sesiones se necesitan?
«En una sola sesión se puede eliminar entre un 25% y un 40% de la grasa acumulada, lo cual visualmente es mucho. En función del caso y de las exigencias propias de cada paciente, puede plantearse una segunda sesión de perfeccionamiento transcurridos unos meses».
¿Cuál es la diferencia con una liposucción?
«La principal diferencia y la más importante es que no es un tratamiento quirúrgico. Es la principal ventaja. No necesitas entrar en un quirófano y evitas todos los riesgos que ello conlleva. Además, no es doloroso, ni necesita tiempo de recuperación».
¿En qué zonas se puede hacer?
1. Submentoniana (papada).
2. Sujetador (zona de la axila en mujeres).
3. Pecho (hombres).
4. Parte superior del brazo.
5. Espalda.
6. Flancos.
7. Abdomen.
8. Cartucheras.
9. Cara interior del muslo.
10. Zona banana (parte inferior de glúteo).
¿Hay una época del año mejor que otra para hacérnoslo?
«Cualquiera. Pero hay que tener en cuenta que los resultados empiezan a ser visibles a partir de la tercera semana, así que si lo que quieres es sentirte bien contigo misma este verano, lo ideal sería empezar en esta época».
¿Quién está detrás del coolsculpting en Marfila?
«El diagnóstico y plan de tratamiento lo realizan entre un doctor (médico estético) y la especialista en estética».
¿Cuándo vemos los primeros resultados tras el tratamiento?
«Los resultados comienzan a ser visibles a partir de la tercera semana». Dafonte explica a COOL que «los estudios científicos demuestran que la reducción de centímetros y pérdida de grasa mejora de forma gradual durante los tres meses posteriores. Lo más importante es que los resultados son definitivos».
¿Hay que seguir algún tipo de dieta o ejercicio a posteriori?
«No es necesario una dieta concreta ni estricta. Pero sí aconsejamos llevar una dieta equilibrada y una vida saludable. Independientemente que se realice algún tratamiento».
¿Hay mucha demanda de este tratamiento?
Marfila es la única clínica en Castilla y León con coolsculpting. Explica su directora que «cada vez hay más demanda de este tipo de tratamientos, porque es sin riesgos, sin dolor y con resultados definitivos. Los pacientes cada día se informan más y son ellos los que eligen calidad sin riesgos».
¿Algún consejo médico tras hacernos el tratamiento?
«Como coolsculpting es un procedimiento no invasivo, sin cirugía, no requiere de cuidados posteriores específicos ni tiempo de recuperación. El paciente puede realizar su vida habitual nada más terminar la sesión».
