A lo largo de nuestra vida vamos acumulando cicatrices y marcas por todo nuestro cuerpo, en rodillas, codos, manos… Algunas, solo nosotros conocemos su existencia y otras son más evidentes, llegando incluso a ser estéticamente desagradables. Hoy en COOLthelifestyle te contamos todo sobre las cicatrices, qué son, cuántas hay y cómo cuidar las heridas para evitar que se produzcan.
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Qué son las cicatrices y cómo tratarlas
¿Por qué se forman? ¿Cómo las cuidamos? Estas son solo dos de las infinitas cuestiones que nos surgen sobre las cicatrices. Muchas de ellas las llevamos con orgullo, como bandera de vivencias pasadas, otras en cambio…
Antes de nada, ¿qué es una cicatriz? Una cicatriz es una alteración permanente de la piel. El proceso de curación de las heridas no es tan perfecto como nos gustaría y en vez de regenerar completamente la piel, surgen las cicatrices. Cada una de ellas es distinta, en función del grosor de la herida, la elasticidad de la piel en la zona afectada, etc.
Una cicatriz puede ser imperceptible, o bien roja, con relieve, rígida… Existen cuatro tipos de cicatrices:
- Normales: son suaves, planas y de un color parecido al de tu piel.
- Atróficas: el tejido está vacío y con marcas. Suelen ser la cicatrices causadas por el acné o la varicela, y pueden afectar a cualquier persona.
- Hipertróficas: aparecen a los pocos meses y disminuyen su tamaño al cabo de dos años.
- Queloides: son protuberancias redondas, rosas o púrpura y brillantes que se extienden más allá de los bordes de la herida. Tardan años en formarse.
El mejor tratamiento en cualquiera de los casos es la prevención, cuidar la herida, limpiarla y extremar las precauciones, sobre todo en lo referente a la protección solar.
Cómo cuidar correctamente una herida
Lava tu herida, desinféctala, extrema la higiene y no la expongas al sol. Cuando la herida este completamente cerrada ya podemos empezar a aplicar productos, antes no, ya que podríamos infectarla: apósitos especiales para cicatrices, vendajes compresivos, gel de silicona, aceite de rosa de mosqueta, cremas y pomadas cicatrizantes.
En resumen, para cuidar una cicatriz debes tener en mente tres palabras clave: higiene, rapidez y perseverancia.
Consejos
La Roche Possay nos da cinco consejos para cuidar las cicatrices:
- Limpia tu cicatriz diariamente con mucho cuidado con ayuda de un gel limpiador diseñado para optimizar el proceso de cicatrización.
- Evita estirar la piel, pues esto puede hacer que la cicatriz se estire o que salten los puntos.
- Asegúrate de quitar los puntos en el momento adecuado.
- Utiliza una crema apta para la aplicación sobre las cicatrices, y masajéala al menos una vez al día.
- Protege tu cicatriz con un protector solar con alto FPS.
- Pide atención médica en ciertas situaciones: fuerte sangrado, enrojecimiento extendido, infección o dolor excesivo.