El cuidado de los pies debería ser un hábito diario, de la misma manera que lo es una rutina facial. Es una de las partes de nuestro cuerpo más importantes y apenas le prestamos la atención que se merece. Llega el momento de cambiar las botas por las sandalias y eso se traduce en prestar mayor atención a nuestros pies. ¿Quieres tener unos pies suaves y perfectos? Sigue nuestros consejos y lo conseguirás.
Consejos para mantener unos pies suaves y perfectos
Aunque no lo parezca, tener unos pies bonitos no es complicado. Solo se necesita constancia y un mayor esmero cuando aumentan las temperaturas y la humedad. Lo más importante es que aprendamos a incluirlos en nuestra rutina diaria de belleza.
- Lávate los pies todos los días, preferiblemente con jabón neutro.
- Dales un baño relajante una vez a la semana. Prepara agua caliente y añade sales especiales, vinagre de manzana o bicarbonato sódico. Tus pies y tus piernas te lo agradecerán ya que te ayudará a bajar la tensión acumulada y a favorecer la circulación. No dejes los pies en el agua más de media hora.
- Sécalos bien después de la ducha o del baño, sobre todo los espacios entre los dedos. Es la forma más segura de evitar la aparición de hongos.
- Elimina las durezas utilizando frecuentemente una piedra pómez o una lija especial. Te aconsejamos ‘atacar’ cuando la piel esté blanda, por ejemplo, después de una ducha.
- No olvides hidratarlos, cuanto más hidratada esté tu piel, más elástica y resistente será. En lo que a los pies se refiere, hidratarlos es como poner una barrera frente a infecciones, durezas y callosidades.
- Los pies son el continente de un buen número de terminaciones nerviosas, ¡invierte tiempo en un masaje para ellos! Hacerlo de forma asidua nos puede reportar numerosos beneficios, como mejorar la circulación, favorecer el sueño, reducir el síntoma de piernas cansadas o aliviar los dolores y fatigas de cuello y espalda. Si incluyes este paso en tu rutina diaria, notarás muy pronto los resultados.
- Un correcto cuidado de los pies pasa por un correcto cuidado de uñas. Las debes limar con precaución, de forma recta y evitando los picos irregulares.
- En cuanto al calzado, elige uno adecuado para protegerlos del frío, apuesta por materiales de calidad, duerme con calcetines preferiblemente y escoge un calzado adecuado para ti.
- El deporte es bueno para la salud y para nuestras extremidades. Realiza ejercicios sencillos de forma habitual para mantener tus pies y tobillos fuertes y jóvenes.