La industria de la belleza ya está posicionando como una de las más importantes del mundo y año tras año, su poder va in crescendo. A diferencia de la moda, el universo beauty no entiende de tallas, colores o alturas y se conceptualiza para todos los públicos. Si se piensa más detenidamente, es toda una alquimia, ya que se crean composiciones que son capaces de reparar nuestra piel, aportando activos que ésta necesita e incluso, ser una alternativa perfecta a la cirugía. Para aprender un poco más sobre ello, hablamos con Shari Jarari, una gurú de sector y cofundadora y CEO de Simon Ourian M.D. ¡Dale al PLAY!
Si echamos la vista atrás, el mundo del cuidado de la piel ha evolucionado de una forma notable y se ha convertido en parte de nuestra vida. Para muchos, esta atención sobre el rostro pasaba desapercibida, hasta que se han desarrollado fórmulas que crean una mejor apariencia. ¿El resultado? Un aumento de nuestra autoestima y un sólido apoyo sobre la salud cutánea.
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Antes de comenzar la entrevista con la experta, tuvimos la oportunidad de charlar con ella en privado y hay una cosa que nos quedó clara: la belleza no es un trabajo para ella, sino algo que trasciende a lo personal y sus palabras nacen de la pasión por una industria que es capaz de cambiar rostros. Con una experiencia de más de 20 años en el sector, ha dirigido prestigiosas marcas como Clinique o Glam Glow, entre otras. Un nombre con gran peso dentro del sector de la cosmética, cuyo objetivo es crear un avance y llevar esta industria al siguiente nivel.
Criada en Canadá, Jafari ha pasado los últimos 20 años desarrollando su carrera en diferentes continentes, hasta llegar a la presente aventura, de la mano del doctor Simon Ourian. Para muchos será un nombre conocido y, para otros, anónimo, pero la marca lleva uno de los nombres más reconocidos de la medicina estética de Hollywood y es la persona responsable de rostros como el de Kim Kardashian, Lady Gaga, la supermodelo Winnie Harlow o la matriarca de la familia Kardashian-Jenner, Kris Jenner. El objetivo de ambos era el mismo: romper moldes en el mundo de la cosmética y llevar el expertise del dermatólogo alrededor del mundo.
Cuando comenzamos la conversación delante de las cámaras, sus palabras llenas de pasión generaron un aura muy especial y esta nacía de la sonrisa con la que reproducía la historia de la marca. «Llevo más de 20 años trabajando en el mundo de la belleza y lo que más me gusta es ver cómo se transforman los rostros de la gente», nos cuenta.
Esta industria es bastante personal y nos resulta curioso porque no se encuentra a mucha gente que tenga una vocación tan clara. «Inicialmente, quise ser dermatóloga, pero cuando descubrí en lo que realmente consistía, decidí que el mundo de la comercialización de productos de belleza era lo mío. He tenido el gran placer de trabajar de la mano de algunas de las mejores marcas del mundo y, ahora, lo hago con Simon Ourian, que es uno de los dermatólogos más reputados que existe.
El aprendizaje es algo muy importante para desarrollar una marca de éxito. La fórmula que Jafari nos muestra después tars 20 años de experiencia es: «Todas las personas son diferentes y cada una tiene su propia necesidad». Al principio puede sonar bastante genérico, pero si ahondamos en ella, la respuesta es clara. Si creamos una comparación con industrias como la moda, esta da vida a diseños generales y acordes al gusto de muchos, mientras que la alquimia de la belleza se tiene que adaptar a un amplio abanico de pieles y crear fórmulas específicas para cada una de ellas. En la marca, la personalización es su mantra y es algo que no es nuevo, puesto que el doctor lleva haciéndolo desde la década de los 90 y lo hemos visto en rostros como el de Sofía Vergara o Penélope Cruz.
«Después de tantos años, vi que era el momento de revolucionar y personalizar el mundo de la cosmética. Cuando escuché el nombre de Simon Ourian y su increíble historia, además de su expertise y su carrera de más de 20 años, sabía que era perfecto para crear algo único y personalizado», nos cuenta Shari Jafari. Sus productos contemplan cada rostro al igual que un artista su obra y, si hay que poner un ejemplo, los daily essentials son perfectos. Una rutina de tres pasos (limpieza, tónico e hidratante) que elimina el exceso de contaminación, proporciona una microexfoliación a nuestra piel y, por último, con la hidratante se crea una fuerte película para evitar el impacto de agentes exteriores. Frente a la cámara, Jafari nos confiesa que es su favorito.
En este punto muchos se estarán preguntando por qué la marca es especial. Además de que su producto es efectivo y demostrado (lo vemos en su web con resultados del antes y el después), han implementado un reconocimiento facial a través de la inteligencia artificial. ¿En qué consiste? Este programa analiza tu rostro a fondo, para detectar el tipo de piel que tienes, además de imperfecciones y te recomienda el producto perfecto. Como bien nos comentaba Jafari, «Hay mucha gente que no tiene tiempo de ir, así que desarrollamos este breve programa en el que podemos analizar tu rostro en dos o tres minutos y lo puedes hacer mientras comes en el trabajo o en el sofá por la noche, es decir, desde la comodidad y sin estrés».
Una de las grandes curiosidades es que, al igual que el doctor hace con Kim Kardashian o Penélope Cruz, llevando un control de su rostro, guardan los datos de los últimos 12 meses para implementar el tratamiento y así poder ver la mejora en la piel del usuario. «En el futuro de la marca, la tecnología es un punto a seguir implementando y estamos seguros que va a cambiar el juego en la industria».
Hay una cosa que es verdad y es que el mercado está saturado de diferentes productos que nos prometen efectos casi inmediatos. Aunque la cultura del mundo de la belleza esté creciendo, muchas veces no entendemos esas complicadas formulaciones y cómo pueden ser de ayuda para nuestro rostro. La marca del dermatólogo Simon Ourian nos aporta tranquilidad, conocimiento y un valor seguro sobre lo que tenemos que usar. No sólo puedes disfrutar de los productos de un reputado experto en belleza, sino que la sensación de aplicarlos en nuestra piel, sabiendo que nos van a beneficiar, es un valor seguro que aporta una tranquilidad necesaria.