Miren Zubiaguirre está al frente de Mauska, una firma de bolsos y accesorios hechos a mano en Ubrique. A Miren le apasiona trabajar con la piel, y define los bolsos como «casi pequeñas esculturas». Desde que visitó su primer taller supo lo que quería hacer, y dicho y hecho. Mauska es una de esas marcas españolas que piensan en la sostenibilidad y sus diseños son sofisticados y llenos de estilo. Tanto es así, que hemos podido ver en más de una ocasión a la Reina Letizia luciendo uno de sus bolsos. Hablamos con Miren Zubiaguirre del proceso de fabricación, del valor añadido que aporta ser una marca española y del fast fashion.
Pregunta: Mauska nace en Marrakech tras un viaje con tus amigas… ¿Qué fue lo que te inspiró?
Respuesta: Me inspiró descubrir el increíble potencial de los artesanos locales y las maravillas que crean con sus manos.
P: Defines a los bolsos como «casi pequeñas esculturas», ¿nos lo explicas?
R: Al igual que una escultura, un bolso debe ser bello en sí mismo. Sin embargo, la funcionalidad también es fundamental, debe adaptarse a las necesidades diarias de quien lo lleva.
«Lo más importante es lograr un equilibrio perfecto entre belleza y funcionalidad»
P ¿Cómo es el proceso creativo?, ¿tienes algún ritual?, ¿en qué piensas?
R: Mi proceso creativo comienza identificando una pieza que siento que falta en mi colección, usualmente surge esta necesidad cuando estoy realizando alguna actividad y desearía tener un bolso específico para ello que no tengo. Una vez identifico lo que quiero, me sumerjo en mi estudio y comienzo a crearlo utilizando sobras inservibles de pieles y muchas grapas.
Esta aproximación tan rudimentaria me permite dar forma a mi propia versión en 3D, asegurándome de considerar cada detalle minuciosamente y calcular las proporciones. A partir de ahí mando hacer el patrón y en base a él creamos el prototipo. Lo pruebo intensamente durante al menos un mes para asegurarme de su funcionalidad y durabilidad. Esto me permite detectar cualquier punto débil, realizar ajustes finales y garantizar que el diseño final sea perfecto antes de presentarlo en mi colección.
P: ¿Qué es lo más importante para ti a la hora de crear un bolso?
R: Para mí lo más importante es lograr un equilibrio perfecto entre belleza y funcionalidad, sin comprometer la calidad y la sostenibilidad.
P: ¿Cuál es el ADN de Mauska?, ¿qué no puede faltar en un bolso de tu firma?
R: Desde nuestros inicios, nos comprometimos a utilizar materiales de la mejor calidad y sostenibles, capaces de resistir el paso del tiempo. La fabricación artesanal es parte fundamental de nuestro proceso, garantizando excelencia en cada detalle y reafirmando nuestro compromiso con la durabilidad y la belleza de cada bolso con una estética atemporal con toques contemporáneos y nuestro toque distintivo.
P: Hemos visto a la Reina Letizia o Vicky Martín Berrocal con bolsos de Mauska, ¿notáis un aumento en ventas cuando un rostro conocido os elige?
R: Sin duda, el hecho de que personalidades tan influyentes como ellas hayan elegido llevar bolsos de Mauska tiene un impacto positivo en nuestras ventas. Son verdaderos referentes de estilo para muchas mujeres.
«El ‘fast fashion’ conlleva serias implicaciones éticas y medioambientales»
P: ¿Cómo llega la Reina a llevar un modelo vuestro?
R: Desconocemos totalmente cómo la Reina adquirió uno de nuestros modelos. Para nosotros, fue una sorpresa total verla lucirlo.
P: ¿Cómo es la mujer Mauska?
R: La mujer Mauska es aquella mujer que valora la buena calidad y está bien informada. En cuanto a mis diseños, me encanta verlos en todo tipo de mujeres.
P: ¿Cuáles son vuestros best sellers?
R: El modelo Rosario, los capazos Majorelle en sus dos versiones, los Pereira y Castañuelas.
P: ¿Qué se lleva este verano?
R: Sin duda, los capazos.
P: ¿Creáis una colección cada temporada?
R: No, en realidad lo que solemos hacer es crear algún modelo nuevo y luego sacar colores o materiales acordes a la temporada.
P: ¿Un diseñador al que admires?
R: Son muchos los diseñadores a los que admiro pero te diría Alexander McQueen y Vivienne Westwood.
P: Tenéis el taller en Ubrique, y la sede en San Sebastián, ¿qué valor añadido aporta ser una marca española?
R: En España, concretamente en Ubrique, Cádiz, tenemos los mejores artesanos. Poseen una tradición milenaria que se ha transmitido de generación en generación, lo cual se refleja en la calidad de sus trabajos. No es casualidad que marcas internacionales de renombre elijan producir sus bolsos allí.
P: Sin embargo, las pieles llegan de España, ¿por qué optas por curtidurías de la Toscana?
R: Es cierto que las curtidurías de la Toscana son reconocidas como algunas de las mejores a nivel internacional pero también lo son las españolas. Nos abastecemos de ambas.
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P: ¿Qué tiene que tener un bolso para que sea una buena compra?
R: Primero de todo es fundamental que te guste su diseño, ya que es algo que te acompañará y complementará tu estilo personal. Además, la calidad es otro factor clave a considerar.
P: Vendéis sólo online, ¿os habéis planteado abrir una pop up ahora en verano en alguna ciudad costera o en hoteles?
R: Poder ofrecer esa posibilidad a nuestros clientes para que pudieran apreciar la calidad de nuestros bolsos sería maravilloso, y esperamos poder brindar esa oportunidad en un futuro, pero lamentablemente estamos desbordados de trabajo y no lo hemos podido organizar.
P: ¿Es difícil abrirse un hueco entre las firmas made in Spain?
R: Sin duda, es todo un desafío. Existe una competencia muy fuerte y de calidad en el sector. Las marcas españolas gozan de gran prestigio a nivel nacional e internacional.
P: Estamos en un momento de compra de moda rápida (el fast fashion) donde por 100€ se puede renovar parte del armario, ¿qué opinión tienes de este consumo excesivo?
R: El consumo excesivo en la moda rápida, conlleva serias implicaciones éticas y medioambientales. Las grandes firmas que ofrecen productos a precios muy bajos a menudo lo hacen a costa de condiciones laborables precarias y de un impacto ambiental muy negativo.
Tenemos que reflexionar sobre el verdadero coste de estas prendas baratas.
P: ¿Crees que la sociedad es consciente del fast fashion y se valora más el trabajo artesano?
R: Definitivamente, especialmente entre las nuevas generaciones, creo que están más informadas y comprometidas en temas como la sostenibilidad.
