¿Has oído hablar de la colorimetría? Es la ciencia que estudia cómo los colores interactúan con tu tono de piel, ojos y cabello, y demuestra que unos tonos te sientan mucho mejor que otros. Es decir, se emplea para saber qué maquillaje, ropa e incluso el color del cabello que más te favorece. Expertas en colorimetría señalan que acertar con el color supone un efecto buena cara al instante, ya que puede iluminar el rostro, además de tener la capacidad de minimizar líneas de expresión y ojeras. Hablamos con una ilustradora y una asesora de imagen que trabajan juntas para que nos expliquen en qué consiste y cómo podemos averiguar cuáles son los colores que mejor nos sientan.
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Teniendo en cuenta aspectos como principalmente el color de piel, y también ojos y pelo, se determina cuál es tu armonía de color. En líneas generales, los colores que tienen en su composición una carga importante de azul son fríos y los que tienen amarillo son cálidos. Pero, como dice la mentora de imagen personal Mariuca Junquera, «la colorimetría se nutre de matices, de milímetros de diferencia entre tonos». Y es en este aspecto que se incorpora la Teoría de las 4 estaciones.
Teoría de las 4 estaciones
Esta teoría segmenta los colores en cuatro armonías que escriben el nombre de las cuatro estaciones. Se dice que cada estación tiene su gama de colores y que nuestras características físicas resultan más favorecidas si van acordes a una de ellas. Mariuca Junquera, nos detalla cuáles son las estaciones.
El Otoño «son tonos cálidos, rotundos, profundos e intensos, con base de amarillo, presencia de negro y luz de oro viejo».
En cuanto al invierno «son tonos fríos, puros, cero sutiles nada de medias tintas. Con base de azul, presencia de blanco óptico, negro y luz de plata pulida».
La primavera abarca «tonos cálidos, claros, delicados, brillantes, con base de amarillo, ausencia de negro y luz dorada».
El verano «son tonos fríos, discretos, brumosos y livianos, con base azul, presencia de gris y luz en un plata gastado»
Test de colormetría personal
Ahora bien, ¿qué estación eres? ¿Es decir, que colores son los que más te van? La ilustradora Nagore Valera, que diseña pañuelos con tu colorimetría, señala que para saberlo lo más aconsejable es hacerte un «test de color con un profesional que te diagnostique y te explique bien porque esto no es un tema de colores sino de tonos de cada color, hay rojos fríos, cálidos, suaves e intensos«.
Además, «La mayoría de los trucos sencillos que circulan por la red, confunden más que ayudan como el ejemplo de mirarte el tono de las venas o si te gusta más como te queda el oro o la plata«, especifica Nagore.
Colores que nos favorecen desde que nacemos
«Tu armonía cromática te acompaña durante toda la vida independientemente de cambios en pelo, en ojos o si estás más o menos bronceada, pues depende fundamentalmente de la temperatura de subtono de tu piel«, detalla Mariuca. «Por eso me parecía un elemento muy importante a incluir en mis pañuelos», dice Nagore que diseña pañuelos de seda personalizados según la colorimetría de las personas, además de la simbología de las historias que le cuenten.
«Quiero que sean prendas vitamina que permanezcan mucho tiempo en tu armario y que tengas ganas de ponértelas todo el rato», explica la diseñadora y añade: «Cuando te pones un tono de tu armonía difumina imperfecciones y hace un efecto filtro de instagram, buena cara«.
Mariuca amplía la información diciendo que «con temperatura en armonía difuminas imperfecciones, mientras que con temperatura en contraste las resaltas».
