Las mansiones que vemos a lo largo y ancho de nuestra geografía tienen un carácter propio que explica la historia de la arquitectura nacional. Grandes linajes aristocráticos escogen a nuestro país para establecer su residencia y las islas son una de las localizaciones más popular. Las Baleares son una de las opciones favoritas, y en esta ocasión ponemos la vista en Mallorca, donde encontramos la mansión de la baronesa Thyssen que, ahora, está a la venta.
Carmen Cervera, más conocida como Tita Cervera o la baronesa Thyssen, contrajo matrimonio con Hans Heinrich von Thyssen-Bornemisza en un juzgado de Inglaterra en 1985 y, desde ese momento, adquirió el título. Ya como baronesa, la actividad de Cervera estuvo influenciada por la de su marido, siempre vinculado al mundo del arte, y terminó adquiriendo una de las colecciones más grandes del mundo.
Además de por las pinturas, el matrimonio tenía una amplia colección de propiedades inmobiliarias alrededor del mundo, pero, sobre todo, en España, donde vivían. Hoy te hablamos de una casa ubicada en el barrio del Terreno de Palma, muy cerca del Castillo de Bellver, y cuenta con una superficie total de 3.100 metros cuadrados, contando tanto la mansión en sí como los jardines.
La vivienda, que fue construida en el siglo XIX y ha sido completamente restaurada. Fue adquirida por Carmen Cervera y Heini Thyssen en la década de los 90 para que la madre de la baronesa pudiera disfrutar de la mansión. Sin embargo, tras su fallecimiento en 1993, los Thyssen decidieron poner la finca en alquiler durante una temporada y ahora han decidido venderla.
La casa principal tiene una dimensión de 730 metros cuadrados, rodeada por unos amplios terrenos, ornamentados con zonas verdes, además de palmeras para otorgar ese punto tropical que buscaban. Desde el exterior vemos tres plantas en una casa blanca (muy común por las zonas cálidas, puesto que reflecta el calor), con una mezcla de estilos. Su imponencia nos evoca al lujo de la zona y las escaleras que se presentan como protagonistas nos auguran algo bueno por dentro.
Cuando cruzamos las puertas vemos que conserva su encanto tradicional de una típica casa residencial de estilo mediterráneo, con el blanco y el azul como hilo conductor en espacios amplios con techos altos. La luz entra a través de las ventanas que están situadas estratégicamente y entra por los cuatro lados de la propiedad, dando igual que momento del día sea. Esto es un gran requisito para la baronesa, puesto que podemos ver lo mismo en otra de sus conocidas propiedades, que está en Marbella.
Para mostrarla han dejado el mobiliario básico y destacan los amplios espacios en color blando con pequeños toques de color en tonalidades pastel. Todo ello se presenta en las seis habitaciones, cinco baños, los varios salones, además de la gran cocina.
La terraza baja es perfecta para tomar el desayuno por la mañana y la otra, ubicada en la azotea, es perfecta para hacer una pequeña reunión de amigos y disfrutar del atardecer con la brisa de Mallorca.
Además, para no perder el toque de exclusividad, hay una casa de huéspedes independiente, perfecta para recibir visitas sin comprometer la privacidad. El precio es acorde a la zona y la Baronesa Thyssen vende esta mansión por 4,95 millones de euros.