Cuando hablamos de casas de las celebrities de Hollywood, hemos visto varios ejemplos que van desde el minimalismo hasta la absoluta opulencia. Partiendo de Beverly Hills, llegando a Bel Air o Montecito, vemos un alineamiento de construcciones imponentes, que nos muestran diferentes tipos de arquitectura, combinando formas rectas y curvas, compitiendo por ser el diseño más original. También las hay de ambiente clásico camuflado en medio de la naturaleza, en un enclave privilegiado, representando lo que significa la palabra mansión. Hay una en concreto cuya magnitud es difícil de comparar y estamos seguros de que se pueden celebrar las mejores fiestas del mundo. Así es la de Oprah Winfrey en Montecito, lugar donde hay más famoso por metro cuadrado y donde Meghan Markle rodó su show de TV.
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La zona se ha convertido en uno de los focos principales para la prensa, ya que no sólo la presentadora vive aquí, sino que a escasos kilómetros de ella, establecieron su hogar Meghan Markle y el príncipe Harry nada más llegar a Estados Unidos. Mientras otras zonas destacaban, Oprah Winfrey prefirió mudarse aquí y eso ha hecho que el valor del área se disparara, además de poner Montecito en el mapa como una de las localizaciones más exclusivas de Los Ángeles.
A simple vista, podemos ver que la propiedad es amplia, pero antes de entrar en materia, sólo matizar que Winfrey posee un carrito de golf para moverse entre las diferentes zonas de la propiedad.
El terreno tiene 30.000 metros cuadrados (más o menos como tres campos de fútbol), sobre el que se asienta una construcción de 2.000 metros cuadrados. Todo está rodeado de zonas verdes, con árboles recién plantados y un jardín repleto de una infinidad de especies de flores como hortensias, topacios, narcisos o lirios, además de otras plantas. Por lo que sabemos en redes sociales, es gran aficionada a la jardinería y ella se encarga de cuidarlas como su valor más preciado. Además, aquí entrevistó a Adele, además de los duques de Sussex.
A diferencia de muchas personalidades, ella compró la casa en 2001 por 50 millones de euros y, desde entonces, la ha convertido en su santuario. Lo hizo cuando tenía 47 años y sus paredes han sido partícipes de algunas de las fiestas más exclusivas del mundo. Al principio no era tan grande, pero con el paso del tiempo, Oprah Winfrey ha extendido la propiedad de 17 hectáreas a 28, al comprar algunos terrenos adyacentes, como la antigua casa del actor Jeff Bridges, por la que pagó 6 millones de euros en 2016. Con una enorme mansión al centro y rodeada por bellos jardines y áreas verdes, la presentadora se refiere amorosamente a ella como su edén.
Su interior es bastante clásico y, nada más entrar, el recibidor es un homenaje a todas las personas que quiere. Esto es así, ya que designó un espacio especial para los retratos de sus seres queridos (familia y amigos) y fotos que le recuerdan sus grandes logros. Esto da un toque hogareño al lugar y dota de una sensación de familiaridad a quien llega. Las paredes en amarillo y las barandillas en metal forjado con motivos naturales son los protagonistas de esta entrada.
Más allá se encuentra su segunda estancia favorita, la cocina. Con la magnitud de la mansión, no hace falta deducir que es amplia y, al margen del clasicismo del resto de la casa, esta es una de las áreas más modernas. Cuando celebra cumpleaños, como el de este año, o cenas de amigos, le encanta cocinar y en sus redes sociales hemos observado un amplio espacio donde la madera y el blanco son los protagonistas, otorgando un minimalismo sobrio y elegante.
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En el caso de que la celebración sea íntima, Winfrey tiene un comedor de madera pulida para doce personas, el cual se impone en una habitación con detalles clásicos como un candil y un espejo de marco dorado. Un espacio íntimo que siempre decora con las flores que ella misma cultiva en los amplios jardines.
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Colindante a esta se encuentra la sala de té, que se ubica en el antiguo cobertizo. Ahora cuenta con un espacio adornado con sillones de mimbre, específicamente colocados para contemplar la increíble vista del jardín y disfrutar de la naturaleza.
La parte de arriba cuenta con seis habitaciones y 14 baños y diez chimeneas que dan un toque idílico al espacio. La protagonista es la estancia principal, la cual cuenta con un baño en suite diseñado a medida y un elemento que es favorito de los amantes de la moda: un amplio vestidor en el que alberga cientos de piezas de alta costura, además de zapatos de Louboutin, Dolce & Gabbana o Prada, entre otros.
Otro de los elementos de la casa son las esculturas, objeto de culto para Oprah Winfrey y todas de grandes artistas. Una de las más destacadas es Hallelujah Lane, una mujer que adora las flores en honor a su abuela. La otra es obra de Francisco Zuniga y se llama Grupo de cuatro mujeres de pie, una pieza de bronce rodeada de motivos florales con cuatro apoyos que muestran los momentos esenciales en la vida de la mujer: la adolescencia, el embarazo, la edad adulta y la vejez.
Está claro que Oprah puede celebrar un gran 71 cumpleaños en su imponente mansión, la cual se valora en la actualidad en 100 millones de euros.
