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Meghan Markle aplaza el estreno de su ‘reality’: así es la mansión de 5 millones donde se grabó

Meghan Markle en la cocina de su 'reality'
(Foto: Netflix)
Javi Fernandez
  • Javi Fernandez
  • Escribir es mi hobby y se ha convertido en mi profesión. Llevo el PR y la comunicación en la sangre, me encanta contar historias con pasión, que cautiven y que inspiren a los lectores. Después de más de 10 años en la profesión, no lo cambiaría por nada del mundo.
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Hoy estaba previsto el estreno en Netflix del esperado reality de Meghan Markle, Con amor, Meghan, pero la duquesa de Sussex ha decidido aplazarlo para centrarse en ayudar a los afectados por los devastadores incendios que asolan Los Ángeles. Inicialmente programado para el 15 de enero, el lanzamiento se ha reprogramado para el 4 de marzo. Aun así, no hemos podido evitar echar un vistazo a la mansión de Montecito (en California) donde se grabó este nuevo formato. En este espectacular escenario, que refleja el estilo de vida de la pareja, se desarrollan las historias y momentos íntimos que promete el reality. Te descubrimos cómo es la impresionante residencia que sirve de telón de fondo a este esperado proyecto.

Muchos piensan que Con amor, Meghan fue grabado en la intimidad del hogar de la pareja, pero no es así. Ellos son muy celosos con su privacidad y, por ello, decidieron que el escenario del programa tenía que ser uno diferente al de su propia cocina.

Su residencia está ubicada en la zona de Montecito y, para que no se desvelara el velo secreto que había sobre el proyecto, decidieron irse a tan sólo 3 kilómetros de su residencia habitual.

Situada en una comunidad cerrada y rodeada de aguacateros y limoneros, esta propiedad pertenece a la adinerada familia Cipolla, que son habituales en los círculos de la alta sociedad que se mueven en la Riviera Americana. La pareja filántropa cuenta con una cartera de propiedades, todas valoradas en cerca de 20 millones de euros, accedió a prestar la propiedad a Netflix y Markle para la grabación del programa.

Meghan Markle y Mindy Kaling
(Foto: Netflix)

La construcción es idílica y no sólo por el diseño del exterior, sino porque está cuidada al más estricto detalle. Se encuentra rodeada de jardines verdes, entre los cuales se ubica una pequeña huerta para plantar tus propios vegetales, además de un cenador con una mesa de madera en el centro, decorado con varios dulces. Nos da un claro ejemplo de cómo montar una propuesta casual, con recetas atractivas a la vista y, además, instagrameable. Ella misma lo afirma y es que en las imágenes previas al estreno cuenta: «Siempre me ha gustado coger algo bastante cotidiano y elevarlo para mostrar su valor».

Imagen del reality de Netflix de cocina
(Foto: Netflix)

La zona interior cuenta con 418 metros cuadrados, cuatro habitaciones, cuatro baños y una cocina digna de cualquier chef profesional, equipada con encimeras de piedra Caesarstone, valoradas entre 230 y 630 euros por metro cuadrado.

Como el de muchos hogares, el corazón de esta es una cocina de lujo que incluye un soporte de seis fuegos de la marca Thermastone, con un precio estimado de unos 17.000 euros, rodeada de espacios de almacenamiento estilo Shaker en tonos crema y herrajes negros. En las tomas promocionales del programa, Meghan aparece arreglando flores y preparando platos que van desde crudités hasta pasteles, cuidando cada punto estético.

Imagen de Meghan Markle en la cocina
(Foto: Netflix)

Los utensilios que vemos tampoco se alejan del mundo del lujo y destacan algunos de la prestigiosa marca Le Creuset, cuyo precio oscila entre 210 y 290 euros por pieza, o una batidora Vitamix E320 Explorian, valorada en 520 euros. Todo esto es acompañado por sus estilismos, que se alejan bastante de lo que nos tenía acostumbrados antes de casarse con el príncipe Harry, que también tiene su cameo en With Love, Meghan.

Mesa de programa de cocina de Netflix
(Foto: Netflix)

La sobriedad y la elegancia se visualizan sobre looks limpios que nos evocan a esas imágenes idílicas y perfectas que llevamos viendo durante décadas. Además, lo complementa con joyas de diseño sin que falte su favorita: Cartier. Este proyecto forma parte del contrato de 93 millones de euros que firmaron con Netflix.