Casi dos años después de su última visita a Inglaterra, con motivo del funeral de Isabel II, Meghan Markle parece planear su regreso a Londres por el décimo aniversario de los Juegos Invictus, un evento deportivo internacional destinado a militares veteranos que el príncipe Harry creó en 2014. Así pues, la posible mudanza de los duques de Sussex a Europa va cobrando cada vez más peso. Tras casarse en 2018, la pareja se mudó a Frogmore Cottage, que se encuentra en los terrenos del Parque de Windsor. Sin embargo, en 2020 cuando renunciaron sus roles como miembros de la realeza, abandonaron esta residencia y se instalaron en California. Te mostramos la mansión donde viven actualmente, y la de vacaciones de Canadá.
Frogmore Cottage es una casa de campo en la que se gastaron 2,7 millones de euros en la reforma para que Meghan Markle y el príncipe Harry se instalaran tras darse el sí, quiero. Fue restaurada por Vicky Charle, interiorista de Soho House, quien unificó cinco dormitorios en uno, cambió las vigas del techo e instaló nuevas chimeneas, entre otros aspectos.
Tras su salida de la Familia Real británica, los Duques de Sussex se mudaron a Montecito, una urbanización exclusiva en el condado de Santa Bárbara, en California. Aquí es donde actualmente viven junto con sus hijos, Archie y Lilibet.
La mansión de Montecito de casi 13 millones de Meghan Markle y Harry
La mansión está valorada en 12,90 millones de euros y dispone de 1.734 metros cuadrados y está construida sobre un terreno de 4.000 m2.
En su interior hay 16 cuartos de baños, nueve dormitorios, varios salones y cocinas… sala de juegos y una vinoteca. Por lo que se puede ver en las fotos, la decoración es clásica y no faltan grandes obras de arte.
Esta casa no es la misma que se puede ver en el documental de Netflix de la pareja. En el docuserie aparece la primera a la que se mudaron al llegar a California, que pertenecía al productor y actor, Tyler Perry. Los duques de Sussex la vendieron pocos meses después del estreno de la serie y se compraron una nueva a escasos cinco kilómetros de esta, en Montecito.
En la isla de Vancouver
Otra de las mansiones de los duques de Sussex se encuentra en Vancouver, ubicada en la costa oeste de Canadá, en la provincia de Columbia Británica. La casa está en Kitsilano, uno de los mejores barrios de Vancouver, frente a la playa y está valorada en 24 millones de euros. Es una construcción de 1.200 metros cuadrados distribuidos en cuatro plantas y presenta seis dormitorios, cinco baños y un amplio salón. La vivienda dispone hasta de un embarcadero privado.
Aunque en un principio se barajó la posibilidad de que, al salir de Reino Unido, se instalaran aquí, esta no es la primera residencia de Meghan, Harry y sus hijos. La familia sólo viene hasta aquí para descansar en sus vacaciones.
