Desde las construcciones de la postguerra, el clásico ladrillo e incluso casas de barro y adobe, diferentes materiales y estructuras se han venido dando mientras echamos la vista décadas atrás. Lo exclusivo se basa en el uso de materiales nobles. Fue en la antigua Grecia cuando comenzaron a aplicar el mármol en las creaciones. Su divulgación se fue dando con los años, popularizando esta robusta roca. Cocinas, baños y salones se componen de este material de alta elegancia. No es muy común ver su uso sobre exteriores, pero los diseñadores de Milad Eshtiyaghi Studio no solo saben definir su imagen exterior, sino que saben jugar con él. Uno de sus últimos diseños ha sido la denominada como House No.01, una casa de mármol en el corazón de Dubái cuyo exterior evoca a una tormenta constante.
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Con el pasado año como fecha de creación, las ideas que definieron el proyecto pretendían representar la grandeza de una obra, basada en una noción que asombrara a la vista y una imposición allá por donde pasara. Debemos destacar su magnitud sobre la vista, puesto que han integrado grandes cubos sobre una construcción imponente, usando largas líneas rectas para crear, literalmente, un gran concepto.
Un exterior muy característico, con un objetivo de diseño minimalista, que respira exclusividad y clase, en definitiva, si estuviéramos delante del edificio, contemplándolo como si de una obra de arte se tratara, cumpliría la función de impresionarnos, incluso podríamos decir que intimidarnos. Con el color negro presidiendo la construcción, el mármol se instruye como protagonista y su pureza lleva ataviada líneas blancas que emulan uno de los grandes fenómenos de la naturaleza, las tormentas.
Esta idea llevada sobre el mundo real, se acompaña con ligeros detalles de madera de roble, asentando la cromática oscura que desprenden ambos materiales con luces led aplicadas en las líneas angulares, aportando calidez y un punto de luminosidad. Montado con un diseño que parece complicado, pero es más simple de lo que creemos, a través de formas cuadradas combinadas entre ellas y superpuestas, coronadas con grandes cristaleras, permiten una entrada de luz óptima, dejando un garaje exterior a la vista y toques de verde para emular la naturaleza que pretende su misión global. Una experiencia para la vista que nos propone esta casa de mármol en Dubái.
