Nutrición

La torrija saludable de Elisa Blázquez, nutricionista: «Sabe a gloria y no lleva azúcar ni fritura»

(Foto: Elisa Blázquez)

La Semana Santa no sería lo mismo sin torrijas. Ese postre clásico, jugoso y especiado, que despierta recuerdos de infancia y sobremesas familiares. Pero, ¿qué pasa si te encanta este dulce y estás intentando llevar una alimentación más saludable? Que ahora, gracias a la receta de la nutricionista integrativa Elisa Blázquez, puedes darte ese capricho sin remordimientos. Y no sólo eso: puedes convertirlo incluso en un desayuno nutritivo y equilibrado. Sí, has leído bien. Torrija y desayuno saludable en la misma frase. Aprende cómo hacer esta deliciosa receta en casa.

Receta de torrija saludable

Elisa Blázquez lo tiene claro: comer sano no significa renunciar a los sabores tradicionales, sino reinterpretarlos. Por eso, ha creado su versión healthy de la torrija, libre de azúcar refinado, sin frituras y sin lácteos, pero con todo el sabor que esperas (y más). «La clave está en los ingredientes», asegura. «Puedes hacer una torrija que sepa a gloria sin necesidad de cargarla de azúcar ni freírla en aceite».

(Foto: Instagram)

El secreto de esta torrija está en los detalles

El pan elegido por Blázquez es el de kamut de masa madre, un pan que puedes encontrar en herbolarios, con buena textura, sin aditivos y mucho más fácil de digerir. A diferencia de los panes integrales comunes o los de molde, el pan de kamut aporta ese punto tierno y firme al mismo tiempo, ideal para absorber bien los sabores sin deshacerse.

La bebida vegetal, en este caso de avena sin azúcares añadidos, se convierte en la base del almíbar. Se hierve con piel de naranja, piel de limón y una rama de canela durante unos 20 minutos. «No hace falta añadir dátiles ni ningún otro endulzante extra», explica la nutricionista. «La leche de avena ya tiene un dulzor natural, y el toque cítrico y especiado le da un sabor espectacular».

(Foto: Pastelería Mallorca)

Una vez empapado el pan en esta mezcla, se reboza en huevo batido con canela en polvo y se cocina a la plancha con sólo una cucharadita de aceite de oliva virgen extra. ¿Resultado? Una torrija dorada, con el exterior cuajado y el interior jugoso, sin exceso de grasa.

Un postre que se convierte en desayuno

Pero lo más sorprendente es la forma en la que Blázquez invita a reinterpretar esta torrija saludable: como un desayuno completo. «Al final, si lo piensas, es una rebanada de pan saludable, con algo de proteína del huevo y una bebida vegetal sin azúcar», comenta. «Es perfectamente válida como desayuno ocasional, especialmente si luego se acompaña de alguna fuente extra de proteína, como un yogur o kefir de cabra».

(Foto: Instagram)

El truco final, según la experta, es volver a bañar las torrijas en la mezcla de avena después de cocinarlas y dejarlas reposar unos 20-30 minutos. Esto les da una textura increíblemente jugosa y realza aún más los sabores.

Una versión actualizada y consciente

Esta receta no sólo respeta la tradición desde un punto de vista culinario, sino también desde uno emocional. Es un guiño a nuestras raíces, pero desde una perspectiva más consciente. «No me gusta usar la palabra light«, dice Blázquez. «Me parece más importante hablar de recetas honestas, saludables y llenas de sabor. Esta torrija saludable  es eso: una versión cuidada, pero sin perder ni una pizca de esencia».

Así que ya lo sabes. Si esta Semana Santa (o cualquier día del año) te apetece una torrija, pero quieres cuidarte, esta receta saludable es para ti. Sabor tradicional, ingredientes reales y el respaldo de una profesional de la nutrición.