Durante los cambios de estación, especialmente en otoño e invierno, las bajas temperaturas pueden afectar nuestro bienestar del sistema de defensas. Sin embargo, junto con una alimentación equilibrada, hay ingredientes de origen natural que seguro no conocías y que nos ayudan a afrontar los meses de más frío.
María Mercedes Sánchez, responsable del área de Información Científica de MARNYS, laboratorio especializado en complementos alimenticios y cosmética natural, revela que “aunque no se suelen conocer mucho, la ingesta de algunos ingredientes como las setas reishi y shitake, el calostro o el propóleo pueden ser de gran ayuda para mantener nuestro bienestar frente a los cambios estacionales”
Reishi y Shitake
Según la especialista, “uno de los ingredientes recomendados para incorporar en nuestro día a día en la dieta que puede ser complementada a través de los suplementos alimenticios, son las setas u hongos, los cuales se caracterizan por tener un elevado aporte de polisacáridos, especialmente betaglucanos1, lípidos, minerales y vitaminas. Son indudablemente ingredientes alimentarios que favorecen el bienestar en general”.
El Reishi ocupa un lugar especial en la tradición oriental y se encuentra incluido dentro de la farmacopea china. Según el herbolario tradicional los asiáticos lo ingerían porque vigorizaba el cuerpo. La responsable del área científica de MARNYS agrega que “es recomendado para aquellas personas que quieran favorecer tanto sus defensas naturales como la circulación sanguínea, propiedades que son respaldadas por la Autoridad Alimentaria Europea (EFSA on hold)”.
Por otro lado, el Shitake también ha sido utilizado históricamente porque “aceleraba la energía vital”. Son setas que crecen en Japón, Corea y la región china de Fujian y Taiwán, y es el segundo hongo comestible más cultivado del mundo con una producción de 2 millones de toneladas. Su aporte nutricional es muy amplio conteniendo aminoácidos (glutamato, aspartato, arginina), carbohidratos (α y ß-glucanos: lentina y lentinacina), fenoles, minerales y especialmente de provitamina D, que bajo la radiación solar se convierte en vitamina D. Sobre la vitamina D, la experta recuerda “que la EFSA confirma que esta vitamina contribuye al funcionamiento normal del sistema inmunitario”.
Calostro
El calostro es la primera leche que obtiene el recién nacido durante la lactancia materna, justo después del nacimiento. El calostro es un líquido espeso, pegajoso y amarillento que contiene varios anticuerpos (inmunoglobulinas), que son responsables de la base de la inmunidad para el bebé proveniente de su madre.
Sobre esto, la experta explica que “muchos alimentos infantiles incluyen calostro bovino2 que puede aportar muchas ventajas al bienestar general similares al calostro humano, y tiene altas concentraciones de IgG (hasta un 51%), así como IgM e IgA”.
Propóleo
El propóleo es fabricado por las abejas a partir de numerosas secreciones resinosas de las plantas y también de las yemas de las hojas de diferentes especies vegetales. Está compuesto principalmente por resina, cera, aceites esenciales, polen, fenoles y flavonoides, vitaminas (B1, B2, B6, C y E) y minerales como el hierro, el magnesio y el calcio.
La galangina3 dentro de los flavonoides del propóleo es el más importante, ya que es un símbolo de calidad y aporte nutricional que siempre hay que validar cuando lo ingerimos (contenido mínimo del 10%).
Los aportes al bienestar general de estos ingredientes alimenticios para nuestras defensas son de valor para incluirlos en la dieta diaria, “existiendo la posibilidad de complementar la dieta con suplementos alimenticios que combinan y aprovechan las propiedades de los cuatro ingredientes mencionados como Propolvit Defens de MARNYS para disfrutar del cambio de estación de la mejor manera”, concluye la experta.
