Los retoques faciales están a la orden del día. Muchas personas lo hacen para crear un equilibrio en la imagen facial o corregir esos signos de la edad que nos delatan, como las líneas de expresión y arrugas, pero otras lo buscan por simple cambio de apariencia. La preocupación por nuestro físico ha ido evolucionando con nosotros como si de otra especie se tratase, pero no ha sido hasta nuestro tiempo cuando han convergido la exposición constante a ese canon ideal, que vemos de forma constante en las redes sociales.
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En muchas ocasiones eso puede producir un problema de no aceptación y que los arreglos estéticos se conviertan en una fijación. El más popular, a parte del bótox, es el ácido hialurónico, el cual destaca por su capacidad para atraer y retener el agua, lo que hace que los tejidos que la poseen se mantengan en buenas condiciones, especialmente en tu piel, donde una de sus funciones principales es mantenerla protegida y renovada.
Su recomendación es comedida, como mucho uno o dos viales de este, ya que el cuerpo no puede permitir absorber más, de tal manera que si nos sobrepasamos con esta molécula los resultados pueden ser poco deseados, sumado a que si el cuerpo no la absorbe bien, se puede enquistar y crear graves problemas de salud. Por ello vamos a hablar de la hialuronidasa, la solución más eficaz para el ácido hialurónico en exceso o ‘mal puesto’.
Labios exagerados o pómulos desmedidos que desafían cualquier ley de la proporción estética es la consecuencia del uso incorrecto y desmedido del ácido hialurónico.
Seguro que te estás preguntando qué es la hialuronidasa, la respuesta es un tratamiento para retirar la enzima natural que degrada el ácido hialurónico y corregir los posibles excesos estéticos y siempre de la mano de profesionales expertos en la materia.
Su aplicación debe de ser exhaustiva. “Mediante un mapeo facial en el que no todas las zonas son igualmente tratadas, ya que depende de sus características anatómicas, se aplican diferentes variables de diluciones y cantidades por las ‘zonas conflictivas’ para recuperar así la naturalidad del rostro”, nos cuenta la Dra. Mar Mira, cofundadora de la clínica Mira+Cueto y experta en medicina estética.
Después de ello tarda en deshacerse entre 1 y 3 días, pero ¿se recomienda combinar con otros tratamientos? “Si, que puede incluir un drenaje facial y, analizando su evolución, se establecen las pautas de los protocolos posteriores. Los pacientes empiezan a verse realmente rejuvenecidos, sin perder su esencia y transmitiendo esas emociones positivas propias de un verdadero rejuvenecimiento”, nos detalla la Dra. Mira.
La hialuronidasa una forma para que nuestro rostro pueda recobrar esa naturalidad que nos permite tener esos efectos reversibles sobre los excesos de la molécula.
