Algas, el superalimento para mantener el peso y la salud a raya
Cada poco tiempo la Universidad de Harvard publica artículos con recomendaciones alimenticias con el fin de mejorar la salud y nuestros hábitos. El último es sobre la importancia de consumir algas, sobre todo en las cenas pues es rico en nutrientes y bajo en calorías. Entra dentro de los catalogados superalimentos, como puede ser el baobab o la moringa pues, en el caso de las algas, estas cuentan con proteína vegetal de alto valor biológico y además es una gran fuente de yodo y aminoácidos. Te contamos cuáles son sus beneficios si la incluyes en tu dieta y cómo consumirla de manera creativa.
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No hay publicación de la Universidad de Harvard que pase desapercibida, como las claves del desayuno perfecto o los tips para conservar el cerebro eternamente joven. Sus estudios y artículos siempre están centrados en alcanzar un estilo de vida saludable como en esta ocasión, que recomienda incluir las algas en nuestra alimentación. Es más, señala que son perfectas para la cena debido a que son muy bajos en calorías y favorecen la digestión.
Existen distintos tipos de algas comestibles y las más comunes y fáciles de encontrar son kombu, wakame, nori, dulse, espagueti de mar, agar-agar, chlorelam espirulina y alga salvaje Klamath. Todas ellas son ricas en zinc, hierro, vitamina B1 y ácidos grasos Omega-3 por lo que también favorecen al corazón y a evitar la inflamación.
Beneficios de las algas
- Regulan los niveles de colesterol.
- Mejoran el tránsito intestinal.
- Aportan calcio, es por ello que se aconsejan consumir en épocas de crecimiento y también durante la menopausia.
- Mejoran las funciones del sistema nervioso.
- Aumenta la inmunidad.
- Son diuréticas.
Grandes aliadas de las dietas para adelgazar
Si incluyes de manera habitual algas en tus platos conseguirás que regulen los niveles de azúcar en sangre, evitando los picos de insulina. Además estimula el metabolismo son bajos en grasas, también en calorías y son muy saciantes. Eso sí, en caso de hipertiroidismo o consumir suplementos de yodo hay que evitarlas a toda costa.
Cómo incluir algas en tus platos
Solo hay que echar un vistazo a la comida japonesa para hacerse una idea de cómo poder consumirlas. Las algas frescas se pueden trocear y freír, entre 5 a 20 segundos, para comer como un snack.
También se pueden cocinar para acompañar a pescados, sopas y en pokés.
En cuanto a las algas deshidratadas, los expertos las recomiendan para elaborar caldos pues «aportan un sabor intenso de umami».
