Los relojes de las décadas de los 80 y 90 han vuelto a capturar la atención de los coleccionistas, no sólo por su carácter innovador y mecánico, sino también por el contexto cultural que los rodea. Con la nueva serie de Netflix Monstruos: La historia de Lyle y Erik Menendez, que relata los brutales asesinatos de sus padres en 1989, las imágenes de esa época han resurgido en el imaginario colectivo. Este renacimiento cultural parece haber coincidido con el resurgir del interés por los relojes neo-vintage, especialmente en la subasta que se celebrará el próximo 8 de noviembre, en Ginebra.
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La serie de Netflix ha avivado la nostalgia de la década de los 80 y 90 y este tipo de subastas no sólo representan el tiempo, sino una ventana a un pasado que, ahora más que nunca, vuelve a estar en nuestro presente.
Una de las citas más esperadas por los coleccionistas de relojes es la subasta organizada por Phillips y Bacs & Russo. Bautizada como Reloaded: The Rebirth of Mechanical Watchmaking 1980-1999, esta subasta rinde homenaje a una era que marcó un hito en la relojería.
Los años 80 y 90 fueron tiempos complejos para la industria tradicional, que tuvo que enfrentarse al desafío del apogeo de los relojes de cuarzo. Sin embargo, la respuesta fue contundente: la relojería suiza apostó por la innovación mecánica, lo que cimentó su estatus de lujo y precisión que perdura hasta hoy.
En un comunicado, Alexandre Ghotbi, representantes de Phillips, subraya que este periodo fue crucial para la relojería mecánica. «Con la llegada de los relojes de cuarzo, la industria se reinventó, dando lugar a relojes únicos y sofisticados».
Los relojes más codiciados
La subasta presentará piezas raras, muchas de las cuales no han visto el mercado en décadas. Un ejemplo es el exclusivo Rolex Daytona con bisel de zafiros, que imita los colores del arco iris. Este reloj, fabricado en los años 90, es uno de los más exclusivos de la marca suiza y su valor podría superar los 3 millones de euros. Uno de los afortunados que posee uno es el futbolista Cristiano Ronaldo.
Otra pieza a destacar de la subasta es el Tourbillon Souverain à Remontoir d’Egalité, de François-Paul Journe. Este reloj, que se lanzó en 1999, fue el primero vendido por Journe y forma parte de un juego limitado a 20 piezas. Su rareza y su historia lo convierten en una joya para los coleccionistas y amantes de los relojes, con un valor estimado de más de 2 millones de euros.
El Philippe Dufour Duality, considerado el primer reloj de pulsera con doble escape, también aparecerá en esta subasta. Se pensaba que sólo se habían fabricado nueve ejemplares de este modelo, pero esta décima pieza desconocida, fabricada para un coleccionista privado, ha salido a la luz. Su valor estimado oscila entre 800.000 y 1.600.000 de euros.