Joyas

Selección de joyas atemporales con las que sorprender el Día de la Madre

Foto: Rabat

El Día de la Madre es una oportunidad para celebrar ese vínculo tan especial que existe entre madre e hija. Un día mágico en el que crear un recuerdo único es posible. Celebra, pues, este día tan especial con un regalo inolvidable. Entre los regalos más especiales destacamos las joyas, ya que cuando se regala una se transmite un sentimiento eterno hacia la persona que la recibe. Las posibilidades de joyas entre las que elegir son infinitas, pero en un día tan especial es importante escoger piezas únicas con las que sorprender y emocionar. ¿Qué es mejor regalar? ¿Un anillo, unos pendientes o un collar? A partir de esta selección resolverás esta gran duda… ¡Estamos seguras de que te ayudará a encontrar la joya perfecta!

Foto: @ariviere

Pendientes de zafiros, esmeraldas y diamantes, de Rabat

El Mediterráneo se personifica en estos pendientes de zafiros, esmeraldas y diamantes de Rabat. Estos elegantes pendientes forman parte de una colección de joyas únicas que representan la belleza femenina hecha joya. Piezas de suma delicadeza; diseñadas de manera artesanal, que proyectan luz.

Foto: Rabat
Foto: Rabat
Foto: Rabat

Colgante Flor de la Vida, de CLO

La Flor de la Vida es probablemente la mandala más universal que conocemos. Tratándose de geometría sagrada, su dibujo parte de un punto central que simboliza la creación o, incluso, la representación de la figura materna.

Foto: CLO
Foto: CLO

Anillo entrelazado, de Suárez

Sorpréndela con este mágico anillo multibrazo entrelazado con piedras espinelas negras de la colección Idalia de Suárez.

Foto: Suarez
Foto: Suarez
Foto: @sita_lombera

Chocrón

No podemos elegir una sola joya de todas las que tiene Chocrón para sorprender a tu madre en este día tan especial. Anillos, pendientes, collares… tú eliges.

Foto: Chocrón
Foto: Chocrón
Foto: Chocrón

Cartier

Oro, diamantes y coral: esta paleta de colores está en consonancia con la herencia cromática de Jeanne Toussaint. Cartier lo transpone en un juego de ilusión, un poderoso trampantojo perfecto para el Día de la Madre.