Rolls-Royce renueva la imagen de su mítico Cullinan y pasará a costar 300.000 euros
Los británicos tienen muy bien cogido el pulso a la elegancia de los vehículos de motor y cuando ves alguna de las marcas que componen su amplio catálogo, se distinguen por ser elegantes y tener unas líneas limpias, que representan la distinción por la que se reconoce a los miembros de su alta sociedad. Rolls-Royce destaca por muchas cosas pero, sobre todo, porque sabe llevar el refinamiento a niveles superiores y haciéndolo cada vez mejor. Analizamos la evolución de su nuevo modelo Cullinan Serie II, que llega con un concepto totalmente renovado.
La marca marcó el inicio de algo diferente en 1904 y sus coches conquistaron un nicho de mercado desaprovechado y ahora es un referente del lujo. Su apuesta siempre ha sido con la excelencia y puedes tener altas expectativas sobre sus creaciones, porque no te van a decepcionar. De hecho, hace no mucho han lanzado el modelo Boat Tail, el cual ha sido adquirido por grandes personalidades como Beyoncé y, además, se llevó el oro al coche más caro del mundo con un precio de 25,4 millones de euros.
Entrando en materia, el Rolls-Royce Cullinan Serie II ha sido presentado como un elemento con grandes menciones en diseño, materiales, acabados e incluso con un amplio equipamiento tecnológico, entregando un resultado con más carácter, potenciado y mejorado. Lo que no ha perdido es ese espíritu de todoterreno de lujo, que es por lo que se caracteriza, además de que tampoco ha tenido que renunciar a la potencia del motor.
Las renovaciones puede que no salten a la vista, pero si observas bien, destacan en una comparación con el modelo original. Comenzamos por el frontal, que ha sido renovado y luce de una forma vanguardista, puesto que se ha añadido una línea de luces led en los costados de los faros delanteros, que también han sido implementados, consiguiendo ese toque futurista y vanguardista que tanto nos gusta.
Aunque el diseño ha salido del cascarón hace escasos días, tiene muchas similitudes con su predecesor, conservando los bordes marcados y las líneas un poco obtusas, que le atribuyen un toque imponente y muy británico. La parte trasera también ha sido renovada y se ve en los nuevos embellecedores cromados, al igual que los laterales, y con un parachoques que viene equipado con nuevas placas fabricadas con acero inoxidable.
Muchos piensan que el modelo Phantom es el que más identifica a la marca, pero este es el nuevo sustituto con el nuevo mensaje que quiere mandar la misma. En su interior se encuentra uno de los aspectos interesantes del Cullinan Serie II de Rolls-Royce: su Espíritu del Éxtasis. Seguro que os estáis preguntando, ¿qué es? Muy simple, en el interior han instalado un pequeño espacio, muy parecido al de una vitrina, en el cual han instalado un reloj analógico, acompañado de la figura por la que se reconoce la marca que, además, se ilumina.
También hay que destacar los avances tecnológicos, puesto que son los que hacen que el coche sea más cómodo de conducir y, seamos sinceros, es una de las partes más atractivas a nivel funcional. Se han implementado nuevas pantallas y herramientas digitales, con el fin de ofrecer una experiencia de conducción más elevada y un confort mayor. Han instalado el sistema Spirit, especializado en optimizar la conectividad. Todo ello se fusiona con unos interiores de lujo, que además llevan material de bambú como novedad.
Este nuevo modelo ha entrado al mercado con un gran interés por parte de los expertos en motor y los coleccionistas, puesto que Rolls-Royce ha subido un paso más y ha desarrollado uno de los vehículos más cómodos y funcionales que existen. Una creación que la podríamos denominar como 360, opuesto que vale para el día a día, además de poder hacer viajes largos con él. Su precio de mercado será de casi 300.000 euros.