Cualquier apasionado de la aviación que se precie, y más concretamente, los seguidores de la automoción conocen el gran talento de Rolls-Royce. De hecho, no mentimos si decimos que más de una vez nos hemos quedado asombrados con sus automóviles. La firma británica de coches de lujo ha demostrado ser capaz de crear modelos dignos de exposición. Hace poco os contábamos la colaboración que había realizado con Hermès para configurar el vehículo Phantom Oribe.
En esta ocasión, Rolls-Royce ha hecho otra incursión en el sector de la aviación creando el avión 100% eléctrico más rápido del mundo. Si bien no es una colaboración como tal, la firma de coches de lujo ha introducido este avión en el proyecto ‘Accelerating the Electrification of Flight’. Este pretende crear, a gran escala, aviones sostenibles. Además, este proyecto está financiado por el Instituto de Tecnología Aeroespacial en unión con el Departamento de Negocios, Energía y Estrategia Industrial e Innovación de Reino Unido.
Este avión denominado ‘Spirit of Innovation’ ha alcanzado una velocidad máxima de 623 kilómetros por hora en vuelo. Pero, este no ha sido el único hito de la compañía. También Rolls-Royce asegura haber batido el récord de velocidad máxima al alcanzar 555,9 kilómetros por hora en un recorrido de 3 kilómetros. Además, este modelo ha conseguido el tiempo más rápido al subir a 3.000 metros en tan solo 60 segundos. Todos estos datos han sido certificados y compartidos por la Federación Aeronáutica Internacional (FAI) y la Federación Mundial de Deportes Aéreos. Ambos controlan y certifican los récords aeronáuticos y astronáuticos mundiales.
Gracias a todo ello, se ha convertido en el primer avión 100% eléctrico más rápido de su clase. Esto ha sido posible gracias a su batería, que cuenta con un tren de potencia eléctrica de 400 kilovatios que le otorgan más de 500 caballos. Desde Rolls-Royce afirman que este ‘Spirit of Innovation’ usa un paquete de baterías de propulsión con 6.480 celdas. Los motores eléctricos ayudan a conservar la potencia cuando el avión desciende.
Para la firma británica supone todo un avance en materia de aviación eléctrica. Sin embargo, este avión no está pensado (por el momento) ser producido. En principio, Rolls-Royce toma esto como un proyecto más para poner a prueba sus motores eléctricos. Pero la compañía sí está colaborando con Tecnam para poner en funcionamiento un avión eléctrico de pasajeros en 2026.