Viajar es uno de los mayores lujos que existen y el sentimiento previo a poder surcar las nubes y volar a miles de kilómetros del suelo, nos hacen pensar sobre las aventuras que vamos a vivir en el destino. A veces es por placer y otras por trabajo, pero es una forma de viajar que te libera del mundo. Muchos pueden hacerlo en los denominados vuelos comerciales, sobre los cuales muchas aerolíneas cuentan con grandes espacios en primera clase que, muchos de ellos, se pueden asemejar a pequeños apartamentos. No muchos tienen el privilegio de poder entrar por una entrada exclusiva, ahorrarse, facturar y los controles de seguridad, puesto que ese pequeño puñado de personas afortunadas se permiten viajar de la forma más exclusiva que existe, con su propio jet privado. Aunque muchos piensen que es un mundo reducido, su amplitud de posibilidades supera a la imaginación de muchos. Centremos la vista en los grandes magnates, en esas personas que sus viajes se hacen sobre auténticas casas, decoradas como tal. Trabajando sobre sus nombres, analicemos los 10 jets privados más increíbles del mundo y sus afortunados propietarios.
- El fabricante de mueble que ahora diseña jets y yates
- El avión con techo panorámico hacia las estrellas
Alisher Usmanov
Como primer nombre de la lista, seguro que no te suena de nada, pero es el propietario del avión privado más caro del mundo. Usmanov es uno de los oligarcas rusos más poderos del mundo y su medio de transporte aéreo se trata de un Airbus A340-300, bautizado como ‘Bourkhan’, en honor a su padre, y equipado hasta niveles impensables tanto en confort como en elementos de seguridad. Esa personalización lleva el precio de esta aeronave por encima de los 400 millones de euros. Y aunque los detalles sobre su interior son de un hermetismo digno de la KGB, contaría incluso con un escudo antimisil entre sus extras.
Familia Real de Catar
Más que un jet privado, parece un yate, o más bien, un transatlántico con alas. Es el segundo avión más ostentoso del mundo, no solo por la decoración, sino por los 370 millones de euros que tiene como coste. La medalla de plata de los aviones privados más caros del mundo es una obra única, que además la casa Boeing va a dejar de fabricar, con lo que seguramente su precio vaya todavía más al alza. Se trata de una súper exclusiva adaptación del famoso Jumbo comercial, que reduce su capacidad original de 450 personas a 89 afortunados, que pueden disfrutar del mayor lujo inimaginable a 12.000 metros de altitud. Sus 450 metros cuadrados albergan 10 suites con la última tecnología y sus correspondientes baños, a los que hay que añadir nueve más para la tripulación. Además de siete cocinas, un comedor para 14 personas, varias bibliotecas y un bar.
Joseph Lau
Uno de los hombres más ricos de china, el inversor en propiedades inmobiliarias se hizo con uno de los aviones más grandes del mundo, siendo un Boeing 747 personalizado, que cuenta con dos plantas en su interior. Sobre los espacios comunes, predominan los acabados exclusivos, pero, sobre los lugares de trabajo, el empresario prefiere la seriedad y la funcionalidad. No podemos obviar los pluses con los que cuenta y la personalización llevada a cabo por el empresario asiático incluye varias suites, un gimnasio y una sala de conferencias y, todo ello, eleva el precio de la aeronave hasta los 332 millones de euros.
Sultán de Brunéi
Resulta asombroso que una de las familias reales más ricas del mundo, no posea la aeronave más grande y costosa. Su Boeing 747 ya tiene unos años y se ha quedado un poco vintage, pero sigue siendo la máxima expresión de la ostentación, ya que el monarca asiático gastó en su día más de 292 millones de euros sólo en la customización de la aeronave. Lo sorprendente es que el avión sea capaz de levantar el vuelo con tanto acabado en oro macizo en su interior.
Príncipe saudí Alwaleed bin Talal al-Saud
El príncipe saudí Alwaleed bin Talal al-Saud repite clásico de la americana Boeing. Un 747 que, sin salir del top ten desde hace más de dos décadas, parecía haberse quedado anticuado para el jeque, que encargó un Airbus 380 que sustituyera a este Jumbo que ya contaba con un espectacular acabado valorado en su día en más de 100 millones de dólares, sólo en extras. ¿El total de su valor? 220 millones de euros.
Tyler Perry
Con un precio base de 25 millones de dólares, sólo en personalizaciones, el actor, director y productor norteamericano Tyler Perry, elevó su coste hasta los 113 millones de euros. Una exclusiva aeronave en la que han viajado personalidades como Mergan Markle y el Príncipe Harry, y que es un auténtico teatro volador con pantallas gigantes, la última tecnología audiovisual, televisión por satélite… Un capricho acorde con la trayectoria profesional de su dueño que, aunque poco conocido en España, es una superestrella del cine musical góspel en EE. UU. Y al que ahora es más fácil ponerle cara, ya que fue uno de los amigos que, junto a Denzel Washington, intentó tranquilizar a Will Smith tras el famoso incidente durante la gala de los Óscar.
Roman Abramovich
Otro gigante de la constructora americana. Tras cuatro años de meticulosa personalización al gusto del ex dueño del Chelsea FC, Roman Abramovich, el ‘Bandit’ comenzó a surcar los cielos en 2007 tras un coste total, entre fuselaje y personalización, de unos 150 millones de euros. Tiene capacidad para 34 pasajeros, varias cocinas, una suite con ducha incluida, tres baños, tres habitaciones para invitados, biblioteca y un gran salón con tres estancias diferenciadas.
Kim Kardashian
La segunda hermana más rentable del conocido clan dio a conocer, hace no mucho tiempo, su nuevo jet privado, una de las grandes adquisiciones del año. Con una estética minimalista como presentación, el modelo que habría adquirido la empresaria es el G650ER y, según la compañía que tiene a la venta estos jets, este ejemplar cuenta con el título de ser el avión más veloz, dentro de los que se categorizan en la sección de business. Respecto a su funcionalidad, la nave tiene espacio para 18 pasajeros y cuenta diferentes estancias como una cocina, un espacio de trabajo y una zona de relax. Su valor se estima en unos 110 millones de euros.
Donald Trump
El expresidente de Estados Unidos y magnate de los negocios prefiere volar a lo grande y, por ello, es propietario de un Boeing-757 que, de normal, tiene una capacidad para volar a 184 personas. El espacio cuenta con pinturas al óleo, una suite con una amplia cama y un espacio de trabajo, todo desarrollado en maderas nobles y el mobiliario forrado el cuero blanco. Los baños cuentan con elementos en oro puro y los espacios comunes, destacan con una elegancia bicolor. El valor del mismo es de unos 100 millones de euros.
Elon Musk
El creador de Tesla y reciente propietario de la red social Twitter, ha adquirido un G700, diseño creado por la empresa Gulfstream. Claro está, que este es más reciente adquisición, pero él es propietario de otros 4 aviones más. Cuenta con una capacidad para 19 pasajeros y cuenta con 5 zonas de estar. La suite está diseñada con una cama individual que se puede expandir para convertirse en cama doble y toda la aeronave cuenta con mobiliario forrado en cuero, incluido el baño. El precio de este jet privado está tasado en 70 millones de euros.