Dentro del grupo de las bebidas premium, el tequila es uno de los destilados más exclusivos que existen. Su sabor es el resultado de la extracción del Agave Azul y es considerada como la bebida más representativa de México.
Podemos encontrarnos con numerosas marcas de tequila, pero nunca habíamos escuchado hablar de un tequila hecho de oro comestible. Así es Tequila Solarum, la bebida hecha con 100% de Agave Azul y con hojuelas de oro comestible, de nada más y nada menos, que de 24 quilates.
Tequila Solarum
Ya hemos visto muchos productos elaborados con oro, desde un teléfono, pasando por unos cascos de música, hasta una bicicleta… pero ha llegado el momento de que el oro empiece a formar parte del destilado más mexicano.
Elaborado con un 100% de Agave azul, este añejo cristalino es único en su tipo, no hay uno igual, ya que está mezclado con 24 quilates de hojuelas de oro comestibles.
Así es Tequila Solarum, completamente comestible, por si había dudas. Sus componentes no afectan a las propiedades del tequila ya que son insaboros a la hora de ingerirse.
Degustación
Estamos ante una bebida suave, pero con un gran carácter, resultado de su equilibrado sabor, profundidad y aroma. Los productos con los que está elaborado han sido seleccionados de los mejores ágaves de la región de Tequila, en Jalisco, México, los que posteriormente han recibido un añejamiento en barricas de roble blanco americano por más de 15 meses.
Su aspecto es cristalino y presenta un aroma con toques de madera y notas dulces. En la boca es el sinónimo de un cuadro, a lo amaderado se une el sabor de la miel 100% de agave. Desde la marca nos recomiendan degustarlo con hielo, sin mezclar y acompañado de un aperitivo salado.
Presentación
Se ha producido de forma artesanal y cuenta con la certificación kosher. Está disponible para una única presentación de 750 mm a 35% alc/vol. Su diseño, como puedes ver, rinde bandera a su interior: exclusivo. Cuenta con un dispositivo led en el inferior que se puede activar en tres modalidades diferentes.
La caja que lo contiene viene grabada con la leyenda de la empresa: «Cuenta la mitología mexicana que el quinto sol fue creado por los dioses de la antigua ciudad de Teotihuacán, cuyo mito da explicación a ciertos fenómenos presentes en los pueblos prehispánicos.
Se dice que el Dios Quetzalcóatl debía de viajar al inframundo a recuperar los huesos humanos de la última era para la recreación del hombre actual y poder poblar el nuevo mundo.
Al llegar al inframundo, tomó los restos de los ancestros y huyó para que los dioses guardianes de ahí no lo detuvieran, pero su armadura de oro y plumajes hacían la batalla muy complicada para huir.
Después de un largo recorrido, Quetzalcóatl cae en un abismo inundado de un líquido con un aroma muy peculiar llevándolo a la inconsciencia por varios días. Al despertar, se dio cuenta que se encontraba en un lugar mágico y que había ocurrido algo inesperado, ese líquido se había fusionado con las partículas de oro de su vestimenta creando un elixir que dio vida al hombre del quinto sol.
Por miles de años, este líquido que llamaron agua de vida eterna quedó resguardado en un lugar secreto para que fuese encontrado por el patriarca del nuevo mundo.
Es aquí donde nace Casa Kadush, cuando un antiguo alquimista que exploraba los campos de agave de la ciudad de Tequila Jalisco se enfrenta a una tormenta que lo hace caer en una grieta abismal llevándolo a descubrir el escondite donde se encontraba el agua cristalina con destellos brillantes. Ahí comprendió que ese líquido era el agua de vida que tanto deseaba encontrar la humanidad, y que él era el elegido de transmitir el sabor de su legado. Así es como se crea Tequila Solarum, un tequila añejo cristalino con hojuelas de oro comestible de 24K».
