Cuando estrellas como Leonardo DiCaprio o Kate Moss aterrizan en Ibiza, no siempre buscan las mismas fiestas explosivas o al DJ residente de turno. Hay otro rollo, otra Ibiza, mucho más auténtica y tranquila, y justo ahí, en el extremo norte de la isla, acaba de abrir sus puertas Cala San Miguel Ibiza Resort, un paraíso para quienes quieren desconectar de verdad.
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Están hoteles en plena ciudadela, como el que Madonna y Mariah Carey se disputaron por la suite con las mejores vistas. Y luego está este resort recién estrenado en abril, que forma parte de la Curio Collection by Hilton, y es puro relax mediterráneo con un punto sofisticado. Aquí no vas a encontrar agobios ni colas, sino una conexión con la naturaleza, la brisa del mar y ese ritmo pausado que todos necesitamos.
La joya de la corona es sin duda The Club Junior Suite, la habitación más top del hotel. Con 45 metros cuadrados, cama king size, sala de estar independiente y una terraza enorme con piscina privada, es un lujo para quienes quieren despertar con vistas al mar. Además, incluye acceso VIP al Chiringuito Beach Club, un pack de bienvenida exclusivo y un FIAT 500 Cabrio para recorrer Ibiza.
«La imagen de Ibiza como capital del ocio nocturno sigue siendo muy potente, pero está cambiando»
Álvaro Porras, director de ventas y desarrollo comercial, lo explica: «Queremos atraer a un turista diferente, parejas de entre 30 y 60 años que buscan algo más que fiesta». Aquí el que viene no le importa quién pincha esa noche en Suhaya, sino disfrutar de la Ibiza más local, con una gastronomía mediterránea y planes para relajarse y reconectar.
Sobre la evolución de la isla, Álvaro añade: «Creemos que la imagen de Ibiza como capital del ocio nocturno sigue siendo muy potente, pero está cambiando. La isla está logrando posicionarse como un destino mucho más completo». Ibiza ya no es sólo la reina de la noche. Ahora viene gente que quiere bienestar, naturaleza y experiencias auténticas. El norte, y especialmente Puerto de Sant Miquel, están en el epicentro de este cambio, con proyectos sostenibles que respetan el entorno y el alma de la isla».
«El norte, y especialmente Puerto de Sant Miquel, están en el epicentro de este cambio, con proyectos sostenibles que respetan el entorno y el alma de la isla»
El norte de Ibiza, y especialmente el Puerto de Sant Miquel, está siendo clave en esta transformación. «Es una zona que conserva la esencia más auténtica de la isla, con paisajes espectaculares y una tranquilidad que cada vez valoran más los visitante», explica Álvaro.
El hotel es un de los años 70, ubicado en la ladera de la montaña frente al mar. «En nuestra renovación, hemos respetado esa estructura como parte del patrimonio arquitectónico del lugar, pero hemos trabajado intensamente para integrarla de manera sostenible en el entorno natural», señala y recalca que siempre han buscado que la arquitectura se adapte al paisaje y no al revés. «Cada detalle está pensado para minimizar el impacto ambiental y ofrecer a nuestros huéspedes una experiencia en plena armonía con la naturaleza de Ibiza».
En Cala San Miguel Ibiza Resort, el lujo se mide en calma, conexión y buena vibra. Y sí, dormir en la suite top cuesta 1.200 € la noche, pero la experiencia lo vale, es un refugio y donde la verdadera Ibiza se descubre sin prisas ni ruido.
