Ultramarinos: «Dicho de un género o de un comestible, especialmente de fácil conservación», dicen en la Real Academia Española. Y las tiendas de ultramarinos, las que hemos visto toda la vida, eran aquellas que vendían productos de ultramar, como las especias, el café… Pocos establecimientos quedan con estas características, aunque alguno hay, y ahora son muchos los locales de cartas pequeñas y mucha conserva los que toman el nombre para su concepto. ¿El último? Santiago Ultramarinos, una taberna para disfrutar de un buen picoteo enfrente del estadio del Santiago Bernabéu.
Un proyecto gastronómico que ha nacido como muchos de los restaurantes que hay en Madrid: tras la reunión de un grupo de amigos. Tras encontrar este local en la Plaza de los Sagrados Corazones, una zona en la que hay pocos lugares con alma justo a su alrededor, Santiago Ultramarinos llega como un santuario del lateo y del producto. Sin florituras, como ellos mismos defienden. Un templo del pica pica, del tapeo, del buen rato entre latas.
¿En su carta? Gildas de tierra o de mar, boquerones en vinagre, navajas picantonas, berberechos al pilpil frío… Entre sus platos más elaborados no falla su tartar de navajas, su ensaladilla rusa, sus albóndigas de ternera con arroz, la lubina curada en salmuera con huevo poché y patata; la carrillera guisada… Pero también hay que destacar otras elaboraciones más sencillas que son su seña de identidad como sus sándwiches y bocadillos.
Entre los entrepanes hay que destacar su bikini de salmón o el bikini de steak tartar, pero también sus santiaguines, como llaman a sus bocadillos, de diferente tamaño. Destaca el de queso crema y mejillones; el de mortadela trufada, burrata y tomate seco; el de jamón con tomate que nunca falla… O el de roast beef, rúcula, mahonesa y anchoa. A veces con un bocadillo bien hecho no se necesita mucho más. También hay chacinas y embutidos, las mejores raciones para compartir entre amigos.
Porque es lo que encontramos en un lugar como Santiago Ultramarinos: parejas que deciden tomar algo o que vienen de cita informal, familias que quedan a disfrutar en buena compañía, tomando algo sin formalidades… O amigos de la zona que deciden brindar, caña o vino en la mano. Porque también hay que destacar que tienen una estupenda carta de vinos en copa. Tienen referencias de renombre como el Vega Sicilia Único 2014, Valbuena 5º Año, Flor de Pingus y Matarromera Prestigio, de la Ribera del Duero; La Nieta, de Rioja; Alabaster y Thermantia, de Toro; y el Scala Cartoixa, de Priorat. Por poner algunos ejemplos. Vinos, raciones, cervezas y latas. No se necesita mucho más para triunfar.