El Hipódromo de la Zarzuela, desde su construcción en los años 40, se convirtió en el epicentro de reunión de la jet madrileña. Años después ocurre lo mismo, este lugar a las afueras de la capital -pero con unas vistas espectaculares de Madrid-, ofrece algunos de los mejores en las calurosas noches de verano.


Hace unos días estuvimos disfrutando de la nueva terraza de Veuve Clicquot a pie de pista -no se nos ocurre mejor plan que champagne, hamaca, sushi y hamburguesa- pero no es el único proyecto gastro que podemos disfrutar. Antes de la carrera nocturna de las 22h, o en plena carrera, podemos complacernos con las vistas del palco premium de Casa Suecia.




El palco premium, que se encuentra justo frente a la meta, abre sus puertas desde las 20h de la tarde para aquellos que no quiere cenar en los fantásticos food trucks, si no algo un poco más elevado. Podemos disfrutar de su clásica carta, pero ellos proponen algo más especial que hace que el plan sea aún mejor. Toma nota.


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Desde Casa Suecia proponen disfrutar de una botella Codorniu ARS Collecta Grand Café junto a uno de sus sushi rolls, lo que sofistica aun más el plan de las carreras de caballos. Exacta Roll, un clásico, con salmón, aguacate, queso crema y sésamo. Imperfecta, con tomate seco, queso de cabra, aguacate y maíz frito. Otro de los bocados: Llaves roll -con salsa dragón, atún, tomate, salsa de anguila, y topping de sésamo rojo con mayonesa spicy– o triplo roll, con con mango, queso crema, pollo teriyaki, con mayonesa y salsa de anguila. Nuestro plan es que termines -o sigas- brindando con una copa de champagne de Veuve Clicquot de la terraza de al lado por las apuestas ganadoras. Porque hay que probar suerte con los caballos. ¿No ganamos? Ya sabes lo que dicen: desafortunado en el juego, afortunado en el amor.

