Semana Santa es la primera gran semana de vacaciones del año y son muchos los que están deseando que lleguen estos días para poder viajar. Si aún no has elegido destino, te proponemos 4 hoteles mágicos y exclusivos a los que escaparte y disfrutar de unos días de lujo sin preocupaciones.
Hotel Excelsior, en Dubrovnik
Sus impresionantes paredes fortificadas y techos rojos contrastan con el azul profundo del mar Adriático. Sin duda, estamos en Dubrovnik, ‘la perla del Adriático’. El casco antiguo de la ciudad croata, cercado por macizas murallas defensivas, es una de esas maravillas que nunca se olvidan y que encierran la esencia profunda de una fantasía medieval frente al Adriático. Reconstruida piedra a piedra tras la guerra de los Balcanes, desde el mar se divisa su silueta y su puerto protegido. Desde tierra firme la mejor vista se consigue desde el mirador del monte Srd. Hoy descubrimos uno de los hoteles de lujo que ha llegado para quedarse al sur de la costa dálmata, el Excelsior.
El Hotel Excelsior, parte del grupo Adriatic Luxury Hotels, cuenta con un espectacular entorno junto al mar con vistas tanto al Adriático como al antiguo casco antiguo. Se trata de una villa histórica construida en 1913 con una ubicación envidiable a sólo 5 minutos a pie de las murallas.
El Excelsior ha acogido a personalidades como la reina Isabel II o Elisabeth Taylor. Pasear por sus tranquilos jardines, por su hermosa playa o cenar en uno de sus tres restaurantes, todos con vistas espectaculares del Adriático, lo convierten en un destino obligatorio. Asimismo, sus 158 habitaciones y suites, la mayoría con amplias terrazas o balcones, ofrecen a los huéspedes un refugio espectacular.
Su piscina natural es un regalo para los sentidos, un lugar en el que poder descansar y disfrutar de un lugar inolvidable.
Royal Mansour, en Marrakech
Viajamos ahora a Marrakech. Un oasis palaciego donde disfrutar del lujo en uno de sus 53 riads. Consolidado como uno de los hoteles más exclusivos del mundo, Royal Mansour se antoja como el destino perfecto esta Semana Santa. Sus 500 empleados trabajan para que los huéspedes de cada riad cuenten con todo lo necesario.
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Cada riad tiene de 1 a 4 dormitorios y se distribuyen en tres pisos con piscina y terraza en la azotea. Desde ahí, se pueden ver las vistas de las montañas del Atlas o la Medina. El Gran Riad, la joya de la corona del Royal Mansour, tiene capacidad para 8 personas, son y 1.800 metros cuadrados y cuenta con jardín privado y piscina.
El Royal Mansour cuenta con una oferta renovada, dirigida al bienestar para que los huéspedes se sumerjan en una experiencia transformadora. Bien de 3, 5, 7 o 14 días, puedes hacer un retiro enfocado a mejorar el bienestar mental y físico: reequilibrio, control de peso, rejuvenecimiento y refuerzo de la inmunidad.
Además ahora, el restaurante LA TABLE, en el corazón del Royal Mansour, ha sido renovado y abre sus puertas con un nuevo concepto de restaurante dirigido por Yannick Alléno. El menú es una oda a la tierra y al mar, combinando magníficos sabores de la tradición culinaria francesa y productos locales extraídos del corazón gastronómico de Marruecos.
Bahía del Duque, en Tenerife
Un sueño marcó el inicio del Hotel Bahía del Duque, el deseo de la familia Zamorano de crear un destino único en el que ofrecer el mejor servicio personalizado. Este sueño se hizo realidad y nació un ambiente perfecto. Más de 20 años después, el hotel sigue ofreciendo a sus huéspedes momentos inolvidables.
Este lujoso complejo hotelero está rodeado por 6 hectáreas de jardines subtropicales. Cuenta con 5 piscinas al aire libre, 8 restaurantes y 7 bares. Un entorno idílico en el que perder la noción del tiempo. El complejo recrea una tradicional villa colonial canaria del siglo XIX desde la que puedes disfrutar de los atardeceres infinitos sobre el mar.
En cuanto al alojamiento, Las Villas forman un idílico pequeño refugio privado donde el servicio refinado y el clima cálido crean un ambiente de privacidad y exclusividad sin igual. Sus amplios y luminosos espacios son obra del prestigioso interiorista Pascua Ortega y han sido construidas en piedra volcánica con un estilo clásico y elegante. Cada uno tiene una piscina privada y una terraza solárium separada. Los dormitorios y baños, acabados con piedra basáltica, se han decorado con elementos vanguardistas en una perfecta combinación de luz, espacio y color.
Abadía Retuerta, en Valladolid
En una finca de viñedos se erige la Abadía de Santa María de Retuerta, que data del 1146, aunque ha sido minuciosamente restaurada y convertida en un exclusivo hotel de 5 estrellas que te espera para que disfrutes de él unos días en Semana Santa. Un enclave único de 700 hectáreas junto al río Duero y a menos de 2 horas de Madrid donde degustar su gastronomía, camuflarte en su naturaleza, disfrutar su vino y vivir el arte.
Abadía Retuerta ha comenzado el 2022 con singulares novedades en torno al wellness, las bellas artes, la naturaleza y la gastronomía. Su ‘Santuario Wellness & Spa’ amplía su carta de tratamientos e invita a sus huéspedes a disfrutar de técnicas de mindfulness, como su nueva experiencia de gestión del estrés y bienestar personal esencial para tomar consciencia del ‘aquí y el ahora’. Asimismo, en junio proponen una escapada ‘consciente’ dirigida por la psicóloga Alejandra Vallejo-Nágera y la experta en coach nutricional, Cristina Barrous. Todo un fin de semana para dedicarse tiempo a uno mismo y para desconectar y reconectar en un enclave inigualable.
Otra de las nuevas experiencias de la que podrán disfrutar quienes visiten Abadía Retuerta es ‘Homenaje a los sentidos’. Una experiencia sensorial única, donde vino, arte y música se unen a través del elegante sonido del piano. Una vivencia simplemente mágica para disfrutar con los cinco sentidos.
Además, la gastronomía como broche final. Capitaneado por el chef Marc Segarra, Refectorio (una estrella Michelin y dos Soles Repsol) presenta una carta renovada, pero con la misma filosofía que siempre: arraigada a su origen, capturando el territorio que le rodea y tomando el producto de temporada y de su propio Huerto de los Monjes como materia prima.