Hay varios lugares en nuestro país que dicen que son como La Toscana, pero hay uno en particular que nos gusta por encima de los demás, porque cuenta con uno de los hoteles más bellos y exclusivos de la zona. Estamos hablando del Priorat catalán, donde encontramos un hotel & winery al que nos apetece escaparnos cualquier día de las próximas semanas. Seguro que lo conoces: hablamos de Terra Dominicata.
En la zona de Monsant, con una de las mejores denominaciones de origen de Cataluña, encontramos este alojamiento que bien podría estar en Italia. Un hotel de cinco estrellas con bodega propia ubicado en un monasterio del siglo XII. Son 26 habitaciones con todo lujo de detalles en medio del Parque Natural del Montsant, en un pasaje completamente idílico donde se respira paz y tranquilidad. El aperitivo perfecto para acompañar un baño y una buena copa de vino.
La familia Vives nos abre las puertas de esta masía tan especial: «Terra Dominicata es el inicio de un viaje sensorial, un periplo para los sentidos», explican. Terra Dominicata se encuentra en la antigua granja del monasterio cartujo de Escaladei. ¿Y qué podemos realizar además de perdernos entre los paisajes, bañarnos en su espectacular piscina o dormir hasta la saciedad en sus magníficas habitaciones?
Disfrutar de la tranquilidad de su spa Les Oliveres, entre olivos, viñas y las magníficas vistas. Un spa construido en madera de roble y que se inspira en las bodegas de la finca. Masaje relajante, masaje descontructarante… Pero hay más. Cata entre viñedos, visita a la bodega, picnic entre los viñedos, ruta a caballo entre los viñedos, clase de yoga… Y también una ruta entre los maestros artesanos de la zona y entre los sitios más históricos del Priorat y todos los tesoros arquitectónicos que encontramos.
Además de esto, podemos disfrutar de su gastronomía. Terra Dominicata cuenta con el restaurante Mater Terrae, bajo la dirección gastronómica del chef Fran López. ¿Algunos de los platos? Ensalada de tomate con cerezas y queso de cabra, lasaña de verduras escalivadas con suave crema trufada, langostinos de Sant Carles de la Rápita a la parrilla, arroz seco de conejo con aromas del Priorat, espárragos verdes y mayonesa de tomillo y romero. Pero hay más: cogote de atún rojo y confitado a la parrilla, paletilla de cordero en dos cocciones… Por supuesto, todo el menú está acompañado de una bodega excepcional. Vinos que encontramos en nuestras 22 hectáreas de viñedo que se cultivan de forma ecológica. Eso sí, destaca su vino rosado de notas frescas y toques anisados, un vino espectacular para disfrutar en una noche de verano en esta Toscana catalana. ¿Brindamos por nuestro próximo viaje a Terra Dominicata?
