La capital de Menorca no suele ser la más visitada, Ciutadella se lleva la palma y siempre está repleta de turistas, pero Mahón -más genunina y menorquina- tiene mucho que ofrecer, más allá de su belleza. La que fuera capital de los burgueses, Ciutadella fue capital y en ella vivía la nobleza, guarda en sus preciosas calles ese carácter inglés que le caracteriza. Y entre sus conocidas casas menorquinas de paredes amarillas y contra ventanas verdes… Restaurantes, hoteles y tiendas con encanto. Para que disfrutes de Mahón en verano, hemos hecho una pequeña guía. Espero que la disfrutes.
Tiendas
El coqueto centro de Mahón tiene preciosas tiendas para hacer nuestras compras. ¿Una de ellas? La Cerería, concept store donde encontramos velas, elementos de decoración y ropa de diferentes firmas. No muy lejos, y con un concepto similar, Kala, para comprar vestidos para el verano. Tiendas sofisticadas no para todos los bolsillos, pero con una buena selección refinada.
¿Otras tiendas para fichar? Boba’s Menorca, para comprar alpargatas artesanas y únicas, o Esparter 1815, donde también podamos comprar ropa seleccionada y artesanía. La que lleva la actual tienda es la séptima generación y es una de las tiendas más antiguas de España. Si queremos firmas de lujo, siempre podemos echar un vistazo a la selección que tiene Es More. Aunque lo mejor es darse una vuelta y encontrar la que más nos guste. Y por supuesto que no falte visite para comprar abarcas: Mibo o Ría. ¿Alguna joya? Vidal & Vidal, que aunque no lo parezca, tiene espíritu menorquín. Y para terminar, una vuelta por Mascaró y Pretty Ballerinas. Así nos llevamos zapatos made in Menorca.
Restaurantes
La propuesta gastronómica de Mahón es cada vez más mayor. Hay que destacar los restaurantes del grupo de Ses Forquilles, entre los que destaca este primero. Reservar en Ses Culleres arriba del puerto o El Rais, para tomar un buen arroz, es siempre una buena opción. Y tenemos vistas a la fantástica isla del Rey.
El bistró Augustín es otra de las opciones, además de Anna e Pepe. También el precioso patio de Ses Bruixes para una cena de verano o Sa Lliga o Can Vermut para un picoteo más informal en el puerto. Y si queremos acercarnos a Cales Fonts, no muy lejos, tenemos Pintarroja, una de las nuevas propuestas gastro en la zona de la mano de Eugeni de Diego, que estuvo en El Bulli. También podemos cruzar el puerto y cenar en La Cantina. Una buena opción para el atardecer, fácil adivinar por qué. Reserva y verás.
Hoteles
Los hoteles boutique proliferan en el centro de Mahón. Can Albertí fue de los primeros, pero hay más: Casa Ládico, Hevresac… y por supuesto, Ses Bruixes o Cristine Bedford. Preciosos hoteles con mucho encanto en casas inglesas en el centro de la ciudad. Si queremos otras opciones, el urbanita Artiem Capri o el hotel Catalonia, con piscina y preciosas vistas al puerto, es otra de las opciones para solar.
Dormir en el bonito y pequeño centro de Mahón es una de las mejores maneras empaparse de la vida menorquina. Del slow life. Del poc a poc. Mahón como lugar base para después moverse por las playas, calas y pueblos alrededor, nos hará entender cómo es la vida de los menorquines en la isla. Porque de eso se trata, de ser viajero, no turista. De entender el estilo de vida de la ciudad. De entender por qué Menorca, para muchos es el auténtico paraíso.