Dubái, la ciudad de los Emiratos Árabes Unidos que más suena, no suena por casualidad. La ciudad, que no deja de rebosar energía, se ha convertido en uno de los destinos punteros de los últimos años. ¿Las razones? Son muchas. Por la energía que desprenden quienes habitan allí -más de un 80% de la sociedad vienen de fuera-, por la cantidad de planes para organizar por el lujo y la sofisticación, que se palpa en cualquier esquina. Por eso Dubái es un buen destino para unas vacaciones románticas. Lo hemos probado en primera persona: planes para todos, restaurantes con lo último en gastronomía, hoteles de ensueño para relajarse… Dubái lo tiene todo para un viaje para dos.
Resorts de lujo en la ciudad
Algo importante de Dubái es la cantidad de hoteles y resorts que encontramos, todos de lujo. Solo en Palm Jumeirah, en su icónica isla de palmera, encontramos más de 40. Entre ellos Anantara The Palm Dubai Resorts, con unas maravillosas suites sobre el mar a las que se llega en boogie. Uno puede dormir en sus cabañas de lujo de madera y pegarse un chapuzón en cualquier momento del día. Desde la habitación, a los pies y por un cristal, se puede ver el mar… Y desde la bañera puede verse la playa. Además, su terraza privada invita a leer libros con el skyline de Dubái al fondo. Si queremos parar el ritmo en esta frenética ciudad, este es el lugar perfecto para hacerlo.
Junto a este hotel, muchas cadenas tienen su propia puesta, y todos ellos, con estupendos restaurantes con la mejor gastronomía, para cenar con nuestras mejores galas sin tener que salir del resort. Eso es lo bueno que tiene Dubái, hoteles cerca de la ciudad en los que también se puede hacer vida en ellos. La agenda solo está llena si queremos.
De Dubái, al cielo
En la ciudad Dubái hay muchos rascacielos, nada tiene que ver el skyline de ahora con el de hace 20 años. Un plan romántico donde los haya es disfrutar de un cóctel viendo el atardecer. Y para eso, Dubái tiene uno de los mejores rooftops del mundo: Cloud 22. En Atlantis The Royal, el resort más lujoso del planeta, encontramos la infinity pool más alta del mundo.
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Las vistas desde aquí dejan sin habla. Y sin duda, es uno de los mejores planes que se puede hacer cuando cae el sol, convirtiéndose en uno de los rincones más románticos de la ciudad. Después, la oferta del hotel es perfecta para quedarse y disfrutar de una cena para dos: desde el restaurante del chef José Andrés o el archiconocido Nobu.
Restaurantes y chiringuitos de moda
Las parejas que buscan unos días románticos también quieren restaurantes para salir a cenar. Dubái tiene todo eso, y tal es su oferta, que cada año abren nuevos proyectos gastronómicos. De hecho, chefs como Dani García también han desembarcado en la ciudad. Pero si queremos probar cosas diferentes, solo hay que echar un vistazo a su oferta de restaurantes. Te recomendamos La Niña, entre rascacielos. Un exquisito restaurante que mezcla gastronomía ibérica y latina, con uno de los patios más bonitos de Dubái.
Si queremos disfrutar de buena gastronomía, pero con un rato de chiringuito junto al mar, el place to be en la ciudad es Tagomago. Inspirado en el Mediterráneo, y con gastronomía española, es uno de los mejores lugares para disfrutar de una jornada en pareja viendo el grandioso Burj Khalifa. Pasar el día con un cóctel en la mano, tomando el sol y siendo mimados por el servicio de Tagomago es un plan imperdible.
Planes para dos
¿Más planes para dos? Disfrutar de la cultura de la ciudad, con el increíble Museo del Futuro, una jornada de compras con algunas de las mejores boutiques del mundo en el Dubái Mall, el centro comercial más alto del mundo, vislumbrar las vistas desde el Burk Khalifa… O pasar una divertida jornada en el parque acuático más grande del mundo, son algunos de los planes que se pueden disfrutar. Incluido visitar la zona del Old Dubái, para imaginarnos cómo era la ciudad hace unos años… Y conocer mucho más su historia. Una semana de Luna de Miel es posible en la ciudad.
El desierto
A menos de una hora de Dubái encontramos hoteles de ensueño en pleno desierto. Pasar algunos noches allí es uno de los planes más románticos que se puede hacer en una escapada en la ciudad. Uno de esos alojamientos es Bab Al Shams, un exquisito hotel con tres restaurantes y habitaciones decoradas con gusto… Que te hacen vivir, por una momento, en un cuento de ‘Las 1001 Noches’.
Pero ya que estamos en el desierto también hay que vivirlo. Y los planes son muchos: desde disfrutar de la naturaleza del desierto, de sus gacelas y sus antílopes, en alguno de los jeeps que ofrece el hotel, desayunar en un campamento en mitad del mismo o la experiencia más mágica de todas… O coger un globo al amanecer. ¿Es Dubái un destino romántico? Absolutamente sí…
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