«Lo que pase en Sutton… se queda en Sutton». El lema nunca ha perdido vigencia y ahora resuena con más fuerza que nunca. Tras meses de silencio y una reforma integral a cargo del arquitecto e interiorista Dani Poch, el club más icónico de la calle Tuset se prepara para escribir un nuevo capítulo en la historia del ocio nocturno de Barcelona.
- García Azpiroz, de ser la gran pescadería de Madrid a referente de lujo con 30 millones de inversión
- Rosauro Varo y Starlite crean el beach club más exclusivo: «Referentes del ocio en el sur de Europa»
Fundado en 2001 por la familia Cano, Sutton se consolidó rápidamente como referencia absoluta de la cultura clubbing. La llegada, hace más de una década, de su director Robert Massanet reforzó su carácter exclusivo y su conexión con el circuito VIP de los grandes DJs.
Desde entonces, su cabina ha acogido a nombres como David Guetta, Steve Aoki, Bruno Mars, Martin Solveig o Bob Sinclar, convirtiéndose en parada obligatoria para estrellas internacionales. La reapertura, prevista en las próximas semanas, no solo devuelve a Barcelona uno de sus templos más legendarios: inaugura una nueva era.

El día que Jaden Smith actuó en Sutton, Barcelona
Sutton no sólo ha sido escenario de noches épicas; también ha recibido a figuras internacionales que han convertido sus apariciones en eventos mediáticos. Uno de los momentos más recordados fue en octubre de 2018, cuando Jaden Smith (hijo del carismático Will Smith) DJ y ahora director creativo de Christian Louboutin, aterrizó en Barcelona en avión privado para actuar en el 17º aniversario del club.

Llegó escoltado por cuatro guardaespaldas, con su habitual aire distante y look urbano, y apenas estuvo unas horas en la ciudad. Tiempo suficiente para cenar en Gatsby (el restaurante espectáculo vecino, con el que Sutton comparte parking) y subirse al escenario. Su actuación duró apenas 25 minutos, pero fue suficiente para desatar la euforia.
Ese episodio resume bien la esencia Sutton: discreción, lujo y la capacidad de reunir bajo un mismo techo a la Barcelona más selecta y a celebridades internacionales de paso.

El ‘place to be’ de varias generaciones
Sutton siempre ha sido algo más que una discoteca. Es un lugar donde conviven generaciones: los hijos (y hasta nietos) de aquella primera Barcelona dorada de los 2000 llenan hoy los reservados VIP con botellas gigantes de champán y vodka que se descorchan sin mirar precios. Una cultura de la exclusividad que se ha mantenido intacta, ahora reforzada con un diseño que promete sorprender.
«Queríamos que el regreso de Sutton fuese algo especial. Éste es sólo un pequeño avance de lo que estamos preparando: una experiencia sensorial completamente renovada», adelanta Robert Massanet, quien dirige esta nueva etapa junto a la familia Cano.