Hay lugares en Madrid donde el tiempo se detiene con cada sorbo. Rincones íntimos, elegantes o canallas donde las copas cuentan historias, los sumilleres ejercen de guías sensoriales y las botellas son pequeñas cápsulas de terroir, emoción y descubrimiento. En esta ciudad que nunca deja de reinventarse, el vino ha encontrado su hogar en bares que son mucho más que puntos de encuentro: son templos modernos para el culto al buen beber.
Desde la majestuosidad enológica de Berria hasta la calidez clandestina de The Library, un wine bar selectivo que huele a cuero, libros antiguos y Borgoña, esta ruta promete mucho más que catar: te invita a sumergirte en atmósferas, matices y paisajes embotellados sin moverte de la capital. Prepara los sentidos: empieza el viaje por los mejores bares de vinos de Madrid.
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Berria
Plaza de la Independencia, 6
Ubicado frente a la emblemática Puerta de Alcalá, Berria es considerado la catedral del vino en Madrid. Con más de 3.500 referencias y 100 vinos por copa, su equipo de sumilleres, liderado por Tomás Ucha Altamirano, ofrece una experiencia enológica sin igual. Su terraza con vistas al Retiro y su cocina sencilla pero cuidada completan la propuesta.

Angelita
Calle de la Reina, 4
A pocos pasos de la Gran Vía, Angelita es un oasis para los amantes del vino y los cócteles. Los hermanos Villalón han creado un espacio con más de 2.000 referencias y una selección de 60 vinos por copa. Su cocina de mercado y su coctelería en la planta baja hacen de Angelita un lugar versátil y acogedor.

The Library
Calle Serrano, 2
Más que un wine bar, es un santuario para los amantes del vino. Con más de 3.000 referencias cuidadosamente seleccionadas, este espacio combina la majestuosidad de una biblioteca palaciega con la calidez de un club privado. Sus estanterías de madera noble albergan desde los grandes clásicos de Rioja y Burdeos hasta joyas enológicas de regiones emergentes como Georgia o Grecia. Uno de los bares de vino más selectos de Madrid.

Vinology
Conde de Aranda, 11 y Zurbano, 13
Fundado por Pilar Oltra, Vinology es un espacio que combina wine bar, restaurante, bodega y tienda. Con más de 500 referencias, principalmente de vinos españoles y argentinos, y una cocina que fusiona tradición y vanguardia, es un lugar ideal para explorar y aprender sobre el mundo del vino.

Caíño
Calle Ibiza, 35
Caíño es un wine bar que apuesta por referencias curiosas y bodegas con proyectos originales. Dirigido por Carlos García y la enóloga Lucía Araque, ofrece una carta de picoteo y platos calientes que complementan su cuidada selección de vinos.

Gota Wine
Calle Prim, 5
En el barrio de Justicia, Gota Wine se especializa en vinos naturales y ecológicos. Su ambiente íntimo, con música de vinilos y una decoración minimalista, crea un espacio acogedor para disfrutar de cada sorbo acompañado de tapas y platos pequeños. Uno de nuestros bares de vino favoritos de Madrid.

Glop
Calle Fernando el Católico, 6
Glop es un pequeño local en Chamberí que ha ganado popularidad por su enfoque en vinos naturales y jerez. Su carta incluye platos como bikini de butifarra y queso de Mahón o albóndigas de fricandó y sepia, que maridan perfectamente con su cuidada selección de vinos.

Bendito, vinos y vinilos
Calle del Humilladero, 3
Este bar es exactamente lo que su nombre promete: una fusión deliciosa entre el vino bien elegido y el sonido envolvente del vinilo. En este local del barrio de La Latina, se descorchan botellas de pequeños productores, se pinchan discos que acarician la atmósfera, y se cocina sin pretensiones pero con mucho alma. Sirven una tortilla de patatas mítica, tienen vermuts de autor y una carta de vinos naturales que cambia según la inspiración y la temporada. Un lugar para perderse sin mirar el reloj.

La Alquimia
Calle de Alburquerque, 9
Discreto por fuera, fascinante por dentro. La Alquimia es uno de esos lugares donde el vino es tratado como lo que es: pura transformación. Su selección se centra en vinos naturales, biodinámicos y de autor, con especial atención a pequeños productores europeos. El espacio tiene una estética sobria, elegante, con guiños a lo oculto y lo experimental. Organizan catas semanales y charlas con viticultores, perfectas para quienes quieren entender lo que beben.

Batch
Calle de San Marcos, 20
Batch es un wine bar moderno, fresco y divertido. Aquí el vino se presenta por lotes o tandas, lo que significa que la carta rota continuamente para ofrecer experiencias distintas. No se casan con ninguna región ni etiqueta, sólo con la calidad. Además, su cocina tiene propuestas atrevidas para compartir, y los fines de semana hay brunch con burbujas naturales. Perfecto para romper mitos y descubrir que el vino también puede ser sinónimo de fiesta.

Masa Vins
Calle de Embajadores, 52
Un rincón con alma catalana en el corazón de Lavapiés. Masa Vins es cálido, pequeño y muy auténtico. Aquí el vino natural es el protagonista absoluto, acompañado de una carta breve pero cuidada de productos artesanos: embutidos, quesos, panes de masa madre. Tienen un enfoque didáctico y cercano, ideal para quienes empiezan en el mundo de los vinos sin sulfitos o simplemente quieren beber rico y diferente. Uno de los bares de vino con más rollo de Madrid.

Corchito
Calle de Palos de la Frontera, 30
Con nombre simpático y espíritu rebelde, Corchito es un nuevo favorito entre los winelovers del sur de Madrid. Aquí se mezclan lo castizo y lo contemporáneo: vinos honestos, sin maquillaje, platos sabrosos con influencias latinas, y una energía vibrante. Tienen una carta viva, con etiquetas que cambian todo el tiempo, pero siempre con foco en lo pequeño, lo local, lo auténtico. Y sí, hay reggaetón suave en el hilo musical, por si quieres brindar bailando.
