Volver a la rutina significa tomar las riendas de ciertas responsabilidades, entre ellas las de cuidar el pelo después del verano para recuperar su vitalidad. Acabadas las vacaciones toca volver a trabajar, muy a nuestro pesar. La vuelta a la rutina nos cuesta a todos, y el estar tan ocupados durante el curso, a veces, nos causa que dejemos de lado nuestras rutinas de belleza y de cuidado. Hoy en COOL the lifestyle compartiremos contigo todos los consejos que necesitas para cuidar de tu pelo después del verano.
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Siete consejos para cuidar tu pelo después del verano
Mantenlo siempre hidratado
Un consejo para mantener tu pelo hidratado es cambiar el acondicionador por una mascarilla hidratante. Aplícala después de cada lavado, entre tres y cuatro veces por semana, para así llevar a cabo un tratamiento más intensivo, que hidratará mucho más.
Utiliza champús sin siliconas
Hilando el consejo anterior, tras el verano siempre es recomendable (si no forma parte de tu rutina) utilizar champús sin siliconas. Este químico lo que hace es recubrir el pelo con una barrera impermeable que no puede romper ni el sol, ni las temperaturas externas o los productos cosméticos, pero tampoco deja que el cabello respire y, además, dificulta la regeneración de las células. Y, por si fuera poco, los champús sin siliconas también contribuyen a una mayor absorción de los aportes de otros tratamientos.
Aclara siempre con agua fría
Si eres como yo que prefieres ducharte con el agua bien caliente incluso en verano, siento decirte que esto tiene que cambiar. Si quieres cuidar tu pelo, tienes que aclararlo siempre con agua fría.
Lo ideal sería hacer esto también en invierno, pero resulta mucho más complicado. Este cambio te hará ver resultados sorprendentes en tu cabello, ya que el agua fría resulta mucho más beneficiosa tanto para el cabello como para el cuero cabelludo, mejorando la circulación sanguínea, favoreciendo la eliminación de residuos y aportándole un brillo extra.
Evita cepillar el pelo mojado
El pelo mojado siempre estará más flexible, y es por ello que la posibilidad de dañarlo aumente. Hay que peinarlo con cuidado tras el baño y, si es necesario, utilizar algún producto que deshaga los nudos de forma suave. Aun así, si crees inevitable no cepillar tu pelo mojado, procura hacerlo con un cepillo específico para ello, para evitar roturas. Por otro lado, al salir de la ducha se debe quitar el exceso de agua presionando el cabello mojado con una toalla, sin retorcer.
Aplica protector solar
Sabemos que llevar siempre una gorra o un sombrero en verano da mucho calor, es por ello que tendrás aque aplicar un protector solar para el pelo siempre que salgas de casa, aunque esté nublado, del mismo modo que lo haces en la piel. De esta manera protegerás tu melena de los rayos UV y evitará que pueda deteriorarse. Esto es especialmente importante si tienes el pelo rubio o teñido.
Evita utilizar secador y plancha
En la medida de lo posible, hay que evitar su uso, puesto que la sequedad es uno de los mayores enemigos del cabello. Las herramientas de calor favorecen la deshidratación, especialmente con las altas temperaturas. Con el calor puedes dejar que el pelo se seque al aire, lo que ayudará a que se mantenga más húmedo. Pero, si para el secado te resulta imprescindible apuesta por un secador con tecnología iónica que elimine el encrespamiento de tu cabello. Nuestra recomendación es utilizar el secador profesional ghd helios, ya que está diseñado para lograr resultados profesionales de forma sencilla y, además, aporta un 30% más de brillo.
Sigue una dieta equilibrada
Cualquier déficit alimenticio puede causar debilidad, fragilidad y caída del pelo, por lo que es importante seguir una dieta saludable. Siempre y cuando tu dieta sea rica en vitaminas A y B y minerales como el hierro o el zinc, entre otros, no tendrás que preocuparte de este apartado.
