Aunque a ella no le guste decirlo y nos señale que son muchos los que ostentarían ese título, no podemos dejar de decir que nuestra protagonista de hoy es la heredera de Pedro Miralles, el imperio de calzado nacido en el año 1959 en Elche y que ahora, como ella misma nos puntualiza, venden zapatos por todo el mundo. Actual directora de Desarrollo de Negocio, es consciente de que ya es la tercera generación al frente de una marca que, a pesar de seguir tendencias, mantiene viva la esencia pura de los inicios de una firma que su abuelo fundó con ilusión y tesón hace ya 65 años.
Con una nueva colección primavera-verano (ya disponible) repleta de colores y llena de reminiscencias sesenteras -que además, introduce zapatillas ultraligeras y una línea nupcial, que incluye los zapatos que nuestra protagonista lució en su boda y que diseñó para ella su padre, actual director general de la empresa- la marca de calzado made in Spain Pedro Miralles no deja de superarse día a día, continuando con el legado de su recientemente desaparecido fundador, el empresario Pedro Miralles Román.
DALE AL PLAY y conoce más sobre esta inspiradora marca que nunca deja indiferente y que siempre, además de un diseño exquisito, apuesta por comodidad y la funcionalidad.
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«Somos una firma con historia, y estamos encantados de compartirlo con vosotros. Fue en 1959 cuando nacimos como firma de calzado made in Spain para mujeres que buscan comodidad, calidad, diseño y moda en sus zapatos.
65 años después, seguimos trabajando con los mismos valores y con la misma esencia que el primer día. La experiencia, los años y vosotros como clientes habéis hecho posible que sigamos creciendo cada día», aseguran.
«Podríamos decir que nuestras ventas son un 50-50, nacional Y exportación. Vendemos zapatos en todo el mundo»
Los inicios: de Elche para el mundo de la mano de un soñador
«Su legado quedará para siempre con nosotros y la firma Pedro Miralles seguirá teniendo siempre la calidad y los valores que caracterizaban a nuestro fundador. Gracias, Pedro, por esta gran familia que has creado. Hasta siempre…», así se despedían en sus redes sociales de su fundador, el abuelo de Patricia, nuestra entrevistada. Un hombre que, como muchos en su época, empezó a trabajar duro siento aún un niño y consiguió con esfuerzo montar una empresa y hacerla próspera.
Trabajador incansable y apasionado por el negocio, Pedro Miralles siguió implicado en la empresa hasta sus últimos días y así nos lo explica Patricia Miralles, su nieta. «Mi abuelo fue el que fundó esta empresa, pero antes de fundarla era representante de marcas. Iba viajando con una maleta, con sólo 16 años se iba por toda España. Desde muy pequeño ya había tocado el tema de los zapatos. Lo que pasa es que en un momento dado, en el 59 pues dice ‘oye, voy a montar mi marca, voy a montar mi empresa’. Y ahí, él comienza toda esta carrera profesional hasta hace muy poco que se murió con 94 años. Seguía viniendo hasta poco antes de morir todos días a la oficina, a vernos, a controlar, a estar al pie del cañón».
«Nosotros seguimos las tendencias pero siempre guardando un poco nuestro estilo, y sobre todo, la comodidad de la clienta»
La flamante nueva colección: calidad y diseño ‘made in Spain’
Inspirado en el estilo propio de los años 60. Los diseños con fuerte carácter mediterráneo, conviven con estampados psicodélicos y siluetas románticas para traer al presente elementos de lo más icónicos. En esta creación los materiales juegan un papel fundamental, texturas como las pieles trenzadas, el elegante charol, o el tejido estampado toman fuerza para dar lugar a una colección apta para todos los gustos (y ocasiones).
En lo que a colores se refiere, la gama cromática, por su parte, apuesta por colores suaves como el rosa palo, o el beige, que se fusionan con tonalidades más vibrantes propias del naranja atardecer, o el rojo intenso. Además, el blanco más puro juega un papel crucial en la línea pensada para esas futuras novias.
Su fascinante, variada y cómoda línea nupcial
La comodidad es algo que prima en las creaciones nupciales de la firma ilicitana. «Hay novias que quieren ir planas, hay novias que quieren ir de colores, hay de todo y de todo tipo de materiales, de pieles diferentes. Nosotros al final, internamente o a través de WhatsApp o a través de la página web o de otros canales, tenemos mucha comunicación de las redes y demás con el público final. Entonces nos preguntan mucho: ‘Oye, ¿qué me puede ir con este vestido?’ Al final, muchas veces somos los únicos que hemos visto el vestido de novia de alguien porque nos preguntan ‘¿qué me puede ir?’ Hacemos un poco de asesores…», cuenta entre risas.
Y sobre sus famosos zapatos de boda…¡también nos contó! «¿Y mis zapatos de novia? Pues, la verdad es que costó. Costó decidirse porque al final yo tenía clarísimo que quería algo que fuera muy fino por delante, pero quería plataforma para ir cómoda. Y la verdad es que fue un viaje de mi padre y mío para conseguirlo. La verdad es que fue apasionante. Son momentos que se me van a quedar para siempre», remata con una amplia sonrisa y cierta nostalgia de saber que ese, junto a su progenitor, fue un momento único.