¿Y si te dijera que Nike acaba de inventar unas zapatillas con motor? No, no es un chiste ni un prototipo de Back to the Future IV: se llaman Project Amplify y prometen correr más rápido y cansarte menos gracias a un sistema de propulsión integrado. Justo después de la maratón de Nueva York, donde miles de corredores han dejado hasta el alma entre los puentes y el Central Park, la idea de tener un modo turbo en los pies suena, como mínimo, tentadora. En este artículo te contamos cómo funcionan estas zapatillas motorizadas, qué opinan quienes ya las probaron y, sobre todo, si deberías (o no) imaginarte corriendo 42 kilómetros con ellas.
El sistema está diseñado para «amplificar el movimiento natural del tobillo y de la parte baja de la pierna», ayudando a que cada zancada tenga un impulso extra sin que tú pongas un sobreesfuerzo excesivo. Nike lo compara con lo que hace una bici eléctrica con tus piernas, pero aplicado a tus pies: un «segunda serie de músculos de la pantorrilla» en miniatura.

En las fases iniciales, ya más de 400 personas han probado el dispositivo durante más de 2,4 millones de pasos en distintos prototipos. Los resultados preliminares sugieren mejoras de ritmo del orden del 20%: un kilómetro y medio que haces en 10 minutos podrías lograr hacerla en 8 minutos con esta ayuda. Y lo más curioso: algunos de los testers aseguran que las subidas dejan de sentirse como subidas. Sí, lo has leído bien: cuesta arriba pasa a sentirse como terreno llano.
Claro que no todo es magia: el diseño sigue en fase de pruebas, y aún no hay fecha ni precio oficiales para un lanzamiento comercial.

Project Amplify no busca, al menos en esta fase, reemplazar el entrenamiento. No vas a dejar de sufrir en tus sesiones de calidad solo porque un motorcito te acompañe. Lo que promete es limitar un poco el sufrimiento innecesario, abrir la puerta a quienes quieren moverse más sin agotarse tanto, y empujar los límites de lo que pensábamos posible.
¿Es una broma? ¿Una exageración tecnológica? Puede ser, pero Nike lo ve como «soñar en grande manteniendo al atleta en el centro». Y tiene una buena razón: en un mercado donde marcas emergentes hiperexigentes arrebatan atención (On, Hoka, etc.), Nike necesita recuperar esa sensación de ser la que está un paso adelante.



