Navidad es ese momento del año en el que el tiempo parece detenerse. Las luces iluminan las calles, el frío invita a abrigarse despacio y el armario se convierte en un refugio de piezas que cuentan historias. En este contexto de pausa y reflexión, la moda adquiere un nuevo significado: ya no se trata sólo de tendencias pasajeras, sino de prendas que nos acompañan, que perduran y que se adaptan a la forma en que queremos vivir. En una conversación cercana y honesta, dos diseñadoras reflexionan sobre el delicado equilibrio entre tendencia y permanencia. Para ellas, la sostenibilidad no es una palabra de moda, sino una filosofía que guía cada colección.
- Sach Atelier, la marca que llevan las chicas más estilosas de Madrid
- ¿Eres ‘pija’ o ‘cayetana’? Te damos las claves para no equivocarte
«Intentamos ser una marca atemporal por toda la parte de sostenibilidad y porque no queremos que la moda sea algo de usar y tirar»
Sin embargo, ser atemporal no significa vivir de espaldas a lo que ocurre en el mercado. Las tendencias existen, influyen y despiertan deseo. La clave, según ellas, está en saber interpretarlas sin perder la identidad propia. «Al final es lo que la gente busca», reconocen, pero siempre desde un filtro consciente que permita que cada prenda siga teniendo sentido con el paso del tiempo.
Ese diálogo entre lo actual y lo eterno se materializa especialmente en los estampados y el color. Los cuadros y las rayas –señas de identidad de la marca– regresan temporada tras temporada, reinterpretados, pero fieles a su esencia.
«Fusionamos las tendencias con lo que siempre hemos trabajado: estampados como los cuadros y las rayas, que ahora están en tendencia pero que nos representan desde el principio»

El color es otro de los grandes protagonistas de la temporada. Lejos de apostar por tonos efímeros, IPA Brand selecciona paletas que conectan con el momento actual y, al mismo tiempo, resisten el paso de los años. Un ejemplo claro es uno de sus vestidos más celebrados.
Esa capacidad de crear nuevos básicos es una de las fortalezas de la marca: prendas que funcionan hoy, mañana y dentro de varias navidades más.
Cuando el frío llega, los abrigos se convierten en protagonistas absolutos. En IPA Brand, las prendas de exterior nacen de un proceso casi familiar. Paloma lo describe con una imagen clara y cercana:
«Nuestro abrigo es como el padre de nuestras chaquetas»
Inspirado en una chaqueta cruzada que tuvo una gran acogida, el abrigo mantiene un corte tradicional con una lectura contemporánea. Es una prenda pensada para acompañar, para envolver y para formar parte del día a día sin perder carácter.

La estampa, como ellas mismas reconocen, es otro de los pilares fundamentales de la marca. No es un recurso decorativo, sino una herramienta narrativa que da personalidad a cada colección. Los estampados hablan del ADN de IPA Brand: femenino, consciente y honesto.
En un mundo de consumo acelerado, IPA Brand propone una pausa. Una forma de vestir que encaja especialmente bien con el espíritu navideño: elegir con calma, apostar por calidad y regalar –o regalarse– prendas con significado. Porque al final, como la Navidad, la moda que perdura es aquella que se construye con intención, memoria y emoción.
