El ambiente de los premios Oscar ya se respira y la ciudad de Los Ángeles se ha vestido de rojo y dorado para conmemorar los galardones cinematográficos más importantes de la escena. Además de su codiciada estatuilla, la alfombra roja es uno de sus grandes reclamos, acompañada de las fiestas que se organizan de forma posterior a esta celebración. Previamente también se hacen grandes cenas y existe una que cobra vida bajo el paraguas de la casa francesa Chanel. De entre las caras asistentes, Adrien Brody y Demi Moore han destacado.
Después de unos meses frenéticos viendo cómo las caras del cine se alzan con los galardones más codiciados de la industria, hoy se pone punto y final a la etapa 2024-2025 con las películas de la temporada. Desde Emilia Pérez, pasando por La Sustancia o The Brutalist, son varias las incertidumbres que planean sobre esta 97.ª edición y muchos los nombres que se barajan en las quinielas, con apuestas casi igualadas.
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Lo importante de esto es el bonito recorrido que supone y que la industria del cine aplauda la obra en cuestión. Antes de sentarse en el anfiteatro del Dolby Theatre de Los Ángeles, muchos de los nominados se han visto en la reunión más codiciada previa a los premios Oscar. El evento, celebrado en el emblemático Polo Lounge del Hotel Beverly Hills, reunió a actores, músicos, directores, productores, escritores y otras personalidades influyentes de la industria en una celebración íntima. Elle Y Dakota Fanning con looks coordinados, Adrien Brody de la mano de sus padres, Kim Kardashian con un Chanel de 1992 y Demi Moore rompiendo las normas y dando una lección de moda.
En estos meses, hemos visto a Demi Moore revivir, volver a tomar las alfombras rojas por su propio pie y por lo que realmente la conocemos, por la actuación. Nos ha dejado muchos momentos repletos de alta costura, pero lo que anoche hizo la actriz protagonista de La Sustancia fue mostrarnos que se ha convertido en un icono de la moda.
Mientras los focos iluminaban un camino lleno de vegetación, la actriz apareció atrayendo las cámaras hacia ella y dejando sin palabras a los asistentes. El estilismo, que pertenece a la colección de alta costura primavera 2025 de Chanel, se componía de una chaqueta péplum estructurada, acompañada de unas camelias bordadas en tela y una bermuda en el mismo tejido de tweed, ornamentada con la flor que caracteriza a la firma francesa. Todo ello complementado con un bolso 2.55 en plata, creado con pailletes. Una lección que habla sobre la ausencia de edad en el mundo de la moda.
Si tenemos que destacar una de las figuras masculinas que asistieron a la cena, no puede ser otro que Adrien Brody. El ganador del premio Oscar a mejor actor en 2009 por su actuación en El Pianista ha estado un tiempo fuera de los focos, pero ha vuelto demostrándonos que sus habilidades interpretativas siguen siendo impecables. Hoy es una de las noches más especiales para el actor y no sólo por su nominación. Si gana, a sus 51 años entraría en la exclusiva lista de intérpretes masculinos que tienen más de un Oscar y la compartiría con referentes como Marlon Brando o Daniel Day-Lewis.
Cuando hablamos de su estilo, sabemos que es bastante sobrio y pocas veces le hemos visto con ostentosos estampados o colores estridentes. Su elección para la cena de Chanel fue un total look black. Un chaquetón de paño negro, un infalible en el armario de cualquier hombre elegante, complementado por una camiseta básica y un pantalón de corte sastre, además de unas botas de cuero negras de diseño limpio. Un momento en el que, más que la moda, el actor centró la atención en disfrutar de sus padres, que fueron sus acompañantes en esta ocasión.
