Hoy en COOLthelifestyle entrevistamos a Delia García, Directora de Sostenibilidad e Impacto Positivo de L’Oréal para España y Portugal, para abordar sus iniciativas con impacto y los principales retos en materia de sostenibilidad, así como la convicción de L’Oréal Groupe de que a través de la belleza se puede embellecer el futuro. Delia García nos detalla, a continuación, cómo todo su trabajo se basa en una estrategia internacional denominada L’Oréal For The Future, que gira entorno a tres pilares estratégicos: «La transformación del negocio y la cadena de valor, el empoderamiento de todo el ecosistema de negocio y la contribución a resolver los grandes retos globales».
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Pregunta: ¿En qué consiste la estrategia global responsable L’Oréal For The Future?
Respuesta: En L’Oréal Groupe, nuestro compromiso es garantizar que nuestras actividades respeten los Límites Planetarios, es decir, lo que el planeta puede soportar, según lo define la ciencia ambiental. Para conciliar nuestras necesidades con la preservación de un planeta con recursos limitados, estamos elevando el listón, en un enfoque de mejora continua, e implementando un nuevo programa de transformación interna. Eso es lo que significa nuestro programa estratégico L’Oréal For The Future, que refleja nuestro compromiso con una transformación radical de nuestro modelo de negocio, colocando la sostenibilidad en primer plano, como un activo de futuro para hacer que nuestro negocio sea más resistente a diversos riesgos, como la escasez de materias primas o de agua.
En concreto, este plan cuenta con ambiciosos objetivos con horizonte 2030 y se estructura en tres pilares estratégicos: la transformación de nuestro propio negocio y nuestra cadena de valor, el empoderamiento de todo nuestro ecosistema de negocio (proveedores, clientes y hasta el consumidor final) y la contribución a resolver los grandes retos globales, especialmente en las áreas donde podemos generar un mayor impacto: apoyar a mujeres vulnerables, fomentar la resiliencia climática y la regeneración de la naturaleza, y promover la economía circular. Al mismo tiempo, trabajamos bajo el principio de no dejar a nadie atrás, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y basamos todas nuestras acciones en la ciencia, el propósito y la ambición».
P: ¿Qué hitos destacarías del trayecto de L’Oréal Groupe desde sus inicios hasta llegar a la actual estrategia L’Oréal For The Future?
R: Ha habido muchos grandes hitos para L’Oréal Groupe en estos años, pero, por destacar sólo alguno, y centrándome en el ámbito nacional, me gustaría resaltar el caso de la Fábrica de Productos Capilares en Burgos. Dentro del primer pilar estratégico que he mencionado con anterioridad, la transformación de nuestro propio negocio y nuestra cadena de valor, tenemos como objetivo lograr que todas nuestras fábricas se abastezcan al 100% con energías renovables para 2030, algo que ya conseguimos con esta planta en 2015, siendo la segunda de todo el grupo en hacerlo y, además, un referente a nivel mundial en sostenibilidad. De hecho, fue la primera de la compañía en incorporar el sistema waterloop para la recirculación y reciclaje de las aguas de proceso.
También hemos hecho en estos años grandes progresos en otros aspectos como el packaging de nuestros productos, con en torno a 3 de cada 4 de nuestros envases de plástico PET que ya provienen de fuentes reciclado y con un 97% siendo concebidos desde el ecodiseño. Además, desde 2013 todos nuestros lanzamientos deben mejorar en su perfil ambiental y social en base a la metodología Sustainable Product Optimization Tool (SPOT) de análisis de ciclo de vida. También, hemos comenzado a etiquetar nuestros productos según su impacto ambiental y social mediante un sistema pionero en el sector que otorga al producto una puntuación en función de su perfil sostenible a través de una escala desde la A, el mejor perfil, hasta la E, la más susceptible de mejora. Garnier fue la primera marca en implementarlo en 2021 y, desde entonces, se han unido otras marcas como L’Oréal Paris o Biotherm.
Asimismo, en el ámbito de impacto social, contamos desde 2016 con la iniciativa Embellece tu futuro, un programa de formación y empleabilidad para personas en riesgo de exclusión social, con escasos recursos o que han abandonado los estudios, para conseguir su inserción laboral como asesores profesionales en el sector de la belleza. Desde entonces, más de 600 personas en riesgo de exclusión social han sido formadas como asesores profesionales de belleza, con una tasa de empleabilidad de casi el 80%. Hace poco finalizamos la edición de 2024 que, por primera vez, ha contado con personas con discapacidad.
P: ¿Cuáles son los próximos retos de L’Oréal Groupe en materia de responsabilidad social, impacto positivo y sostenibilidad?
R: Tenemos tantos retos que es difícil destacar los principales. Por ejemplo, un gran desafío en el que estamos trabajando, de la mano de los mejores científicos y talentos, es el cambio climático. La urgencia de hacer cambios en nuestra forma de trabajar y en nuestro negocio para enfrentarlo es inmensa. La velocidad a la que debemos actuar es clave, y uno de los mayores retos es lograr descarbonizar nuestras economías y hacerlo a un ritmo que sea adecuado tanto para el planeta como para mantener la competitividad de las empresas. Como grandes motores del cambio, las compañías debemos liderar este proceso y demostrar que es posible tener un negocio verdaderamente sostenible sin perder competitividad. En este sentido, a finales de 2023, alcanzamos el 91% de energía renovable en nuestras instalaciones y, en España, podemos decir con orgullo que el 100% de la electricidad consumida es renovable desde 2018. Por logros como estos, hemos sido reconocidos por 8º año consecutivo con la triple A (la máxima puntuación posible) de CDP (Carbon Disclosure Project).
Asimismo, en septiembre de 2023, L’Oréal Groupe anunció un nuevo fondo de dotación de 15 millones de euros para ayudar a las comunidades vulnerables a desarrollar una mayor resiliencia frente a los desastres climáticos. Este Fondo de Emergencia Climática apoyará a las comunidades de las zonas más expuestas permitiendo que organizaciones asociadas expertas las ayuden a prepararse y recuperarse de los desastres climáticos.
Por otro lado, en España, otro reto importante que enfrentamos es la gestión del agua. Aunque este desafío está conectado con el cambio climático, tiene particular relevancia a nivel local, y forma parte también de la estrategia de L’Oréal For The Future. Para ello, estamos trabajando desde las formulaciones hasta la fase final del producto, y a través de iniciativas como Hairstylists For The Future estamos incorporando dispositivos de ahorro de agua en los lavacabezas y tecnologías que optimizan su uso, como sistemas que solo activan el agua cuando alcanza la temperatura adecuada.
Por último, me gustaría incidir de nuevo en los colectivos vulnerables. Si para cualquier persona tener trabajo es importante, para los colectivos vulnerables el empleo es aún más relevante, ya que puede ayudarlos a revertir esa vulnerabilidad y a integrarse y participar plenamente en la sociedad. En España, esta situación afecta a una preocupante cantidad de personas, concretamente a 13,1 millones de personas (el 27,8% de la población) según datos de AROPE.
En este sentido, el compromiso de L’Oréal Groupe es ayudar a más de 100.000 personas de comunidades desfavorecidas a acceder al mercado laboral; en España, el objetivo es integrar a 1.300 personas. Para ello, contamos con la ya mencionada Embellece tu futuro y Escuela de Excelencia Industrial, en Burgos. Además, este mismo año pusimos también en marcha el Salón Embellece tu futuro, junto a la Fundación Altius, un espacio habilitado dentro de las instalaciones de la fundación, donde los beneficiarios pueden disfrutar de un servicio socioestético de manera gratuita. Gracias a esta colaboración, podrán integrar los rituales de belleza como una parte de su autocuidado individual, clave en su interacción social y su bienestar emocional.
P: ¿Cómo conseguís empoderar al ecosistema de negocio?
Respuesta: En L’Oréal Groupe nos esforzamos por involucrar y empoderar a todo nuestro ecosistema empresarial. Tener nuestros propios objetivos en materia de sostenibilidad es esencial, pero sin la participación de nuestros proveedores, empleados, clientes y consumidores, no podríamos afrontar este modelo de transformación.
Por ser más específica, estamos construyendo junto a nuestros proveedores estratégicos hojas de ruta comunes para alcanzar nuestros respectivos caminos hacia el Cero Neto, y no dudamos en compartir nuestras mejores prácticas de descarbonización con nuestros socios. Hemos establecido así una importante hoja de ruta hacia la circularidad en toda la cadena de valor: desde ingredientes de base biológica, derivados de minerales abundantes o de procesos circulares, hasta la fabricación en plantas que utilizan energía renovable o el uso de materiales de embalaje reciclados o reciclables. Como se puede ver, es una lista bastante larga.
Pero involucrar a todo nuestro ecosistema va más allá de nuestra cadena de valor. También involucramos a nuestros consumidores otorgándoles la información necesaria para que tomen decisiones de consumo más conscientes, como ya he mencionado anteriormente, a través de nuestro sistema de etiquetado de impacto ambiental y social.
P: ¿En qué ámbitos trabajáis la preservación de los recursos naturales?
R: En primer lugar, queremos que el 100% de los ingredientes para fórmulas y materiales de envasado sean trazables y procedan de fuentes sostenibles para 2030 (alcanzamos el 93% en 2023). Además, trabajamos para dejar una huella positiva en todas nuestras fábricas, oficinas y centros de distribución. Es decir, realizamos un inventario de toda la flora y fauna, que revisamos regularmente, para comprobar que la biodiversidad en los lugares donde estamos presentes no disminuye. Además, llevamos a cabo proyectos de regeneración a través de la reforestación y la creación de huertos ecológicos.
Otra área en la que estamos realizando muchos esfuerzos es la relacionada con los ingredientes, con el objetivo muy concreto de que el 95% de los ellos provengan de fuentes vegetales renovables, minerales abundantes o procesos circulares, y que el 100% de las fórmulas sean respetuosas con el entorno acuático para 2030. Igualmente, el 100% de los plásticos utilizados en nuestros envases procederá de fuentes recicladas o de base biológica (llegaremos al 50% en 2025) y el 100% serán rellenables, reutilizables, reciclables o compostables.
Por último, en el eje de agua, nos hemos fijado el objetivo de que el 100% sea reciclada o reutilizada. Este objetivo tiene un importante impacto a nivel de producción, pero también contempla toda el agua que interviene en el ciclo de vida del producto, desde la que se utiliza en el cultivo de las materias primas, en las fórmulas de los productos, la transformación, la logística y la fase de uso, que es donde se concentra más del 50% del impacto medioambiental de un producto.
P: ¿Qué ha provocado que L’Oréal haya puesto el foco en la huella de carbono digital?
R: Se calcula que el ecosistema digital es responsable del 4% de las emisiones mundiales de CO2 y se espera que aumente hasta el 8% en 2025, lo que equivale a las emisiones mundiales del tráfico aéreo y del tráfico automovilístico, respectivamente. Por tanto, la reflexión estratégica sobre nuestra responsabilidad digital se cimenta en la ética de las compañías. Como primer anunciante de España y cuarto mundial, era lógico que L’Oréal Groupe se comprometiera a medir y reducir las emisiones de CO2 generadas por sus campañas en medios digitales y a minimizar su impacto medioambiental.
P: ¿Cómo se mide la huella de carbono de una campaña estándar de L’Oréal?
R: «El primer paso para reducir nuestra huella de carbono en los medios digitales es realizar un seguimiento y una medición, para lo cual nos hemos asociado con IMPACT+, una start-up francesa que opera en 47 países. Junto con IMPACT+, podemos medir las emisiones de gases de efecto invernadero de todas nuestras activaciones en medios digitales, en redes sociales, vídeo instream y compra programática. Con este conocimiento, podemos activar palancas y optimizar nuestras campañas en medios digitales para reducir las emisiones y supervisar nuestros progresos.
P: ¿Cómo la frenáis? ¿Qué acciones lleváis a cabo?
R: Gracias a esta colaboración con IMPACT+, somos capaces de reducir la huella de carbono hasta un 30% con sencillas medidas como, por ejemplo, adecuar el tamaño de vídeos o utilizar la wifi en lugar de los datos para las descargas. Pero también podemos reducir nuestra huella en el día a día al utilizar la mensajería instantánea en vez de un email con grandes adjuntos, utilizar fondos estáticos en nuestras conversaciones, apagar la cámara en las videollamadas con alto número de usuarios o abogar por el cara a cara cuando sea posible.