Hollywood lleva décadas lleno de estrellas, pero los personajes que encontramos en las películas no son los únicos que deslumbran. Sus laderas y montañas están repletas de construcciones que hablan de diferentes tipos de arquitecturas y en su interior se encuentran personajes que han escrito la historia del cine que está grabado en nuestra retina. Existen ocasiones en las que estas salen a la venta y surge esa extraña oportunidad que nos regala la experiencia de residir en el mismo lugar donde nuestros actores favoritos han vivido sus éxitos. La última que hemos descubierto es la de Cary Grant, que está a la venta.
El intérprete inglés ha sido protagonista de muchos títulos, además de un galán de Hollywood que alcanzó la fama mundial en la era dorada del cine. Conocido por su encanto y su versatilidad en comedias románticas y películas de suspense, llegó a trabajar con prestigiosos directores como Alfred Hitchcock. Su garbo y su forma de interpretar conquistaron a los espectadores, llegando a ser todo un icono.
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40.000 euros en 1946
Situada en Beverly Hills, esta fue adquirida por Grant en 1946 por lo que hoy parece una cifra impensable: en torno a los 40.000 euros. Su esencia se fue transformando con el tiempo, puesto que se convirtió en el lugar seguro donde poder charlar con grandes amigos como Frank Sinatra o Gregory Peck.
Después de su muerte, su viuda decidió conservarla, haciendo los cambios pertinentes para conceptualizarla acorde a su linaje cinematográfico, además del deseo de vivir con elegancia y amplitud. Con esto eliminó los techos bajos, consiguió unas increíbles vistas, tanto a la ciudad como al océano, además de eliminar otras vicisitudes que complicaban tener esa vida cómoda que da este tipo de mansiones.
Un homenaje moderno a Cary Grant
Finalmente, consiguieron una vivienda prácticamente nueva, de más de 1.400 metros cuadrados, con un estilo más moderno, atemporal y que se complementa de manera perfecta con el ambiente californiano. Con una reforma terminada en 2022, los elementos recargados salen de esta creación, para dar la bienvenida a la madera de roble claro y los colores atemporales como el beige y la variedad de blancos.
La distribución se divide en varias alturas, contando con un total de seis dormitorios y 14 cuartos de baño. Una de las limitaciones que había en esta mansión de Cary Grant eran las paredes, es decir, todas las estancias estaban separadas y eso, además de quitar sitio, daba una sensación de que el espacio era más pequeño de lo que era. Ahora, el concepto abierto es el que reina. Tanto la cocina, el salón y el comedor se integran en un sólo ambiente, bañado con la luz natural de Los Ángeles, que cruza a través de sus grandes ventanales.
Vinoteca, gimnasio y una sala de cine
Pero hay algo que no puede faltar en la casa de ningún actor: una sala de cine. Complementando a otros espacios dedicados al ocio, como una amplia vinoteca, sala de masajes o un gimnasio equipado con máquinas de última generación, la viuda de Cary Grant decidió que había que hacer un espacio en su honor. El lugar está equipado con unas cómodas butacas frente a una amplia pantalla y, lo que no puede faltar, un equipo de sonido con tecnología Dolby Atmos, para que el largometraje se perciba igual que en un cine.
Pero después de mucho tiempo, esta ha salido al mercado de las mansiones célebres y la cifra no sólo habla de metros cuadrados o amenidades… Esos 66 millones de euros hablan de cine, historia y, sobre todo, del privilegio de vivir en el mismo espacio en el que Cary Grant compartió vida e intimidades.
