Casas de campo portátiles hay muchas. De diferentes tamaños y materiales. Pero todas tienen en común una cosa que las hace únicas: el contacto con la naturaleza. Para disfrutar del aire libre, lo último en estilo de vida rural son las casas de campo prefabricadas, industrializadas y portátiles, que se encargan y se instalan en cuestión de semanas en cualquier terreno rústico con permiso, eso sí.
Hay matices y no son todas las casas industriales que se transportan son exactamente lo mismo. Algunas son modulares portátiles y otras permanentes.
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Son las ‘Tiny House’, es decir, las minicasas que están cada vez más de moda para una escapada rural o incluso como residencia habitual. Son sostenibles, acogedoras y están normalmente ubicadas en plena naturaleza.
El movimiento Tiny va más alla de las casas en sí; es una filosofía de vida que promueve la autonomía alimentaria, la independencia energética y la eficacia financiera. Este tipo de vivienda es una consecuencia.
‘Tini’
Tini es una de las empresas españolas lideres del sector de las casas portátiles. Es decir, modulares hechas en su fábrica de Extremadura y que se llevan en camión hasta el lugar de instalación definitiva.
La empresa como tal fue creada hace apenas dos años y no paran de atender pedidos.
«Estamos muy contentos», comenta la arquitecta y co-fundadora, Pilar Cano-Lasso a COOL.
«Nuestro público son las viviendas familiares’, dice la co-fundadora de la empresa. «Y todas nuestras casas necesitan cimentación», añade.
«Son casas modulares industrializadas, hechas 100% en España, que podrás personalizar según lo que necesites», dicen a COOL.
Puedes elegir entre diferentes modelos, acabados y equipamiento. Todo en 100 días. Una vivienda a la carta hecha en una fábrica. Incluida la chimenea, que es clave en esta época del año.
Escuchar y ver cómo arde la leña tranquilamente, además del agradable ambiente que crea, es uno de los alicientes más deseados en el campo en otoño, sin duda.
El joven estudio madrileño encabezado por Ignacio de la Vega y Pilar Cano-Lasso está detrás de las exitosas viviendas modulares que se pueden transportar por carretera y llevar a dónde el cliente quiera.
Con un área habitable de 34 metros cuadrados, la minicasa incluye salón, comedor, dormitorio y baño, espacios que el usuario puede decorar a la carta.
‘Liten’
‘Liten’ es una casa prefabricada de 30 metros cuadrados que puede ser instalada prácticamente en cualquier lugar, teniendo un mínimo impacto sobre el entorno.
Está pensada para ofrecer una solución habitacional rápida y sostenible para el turismo rural.
Se trata de una cabaña que se construye en fábrica, se transporta hasta un lugar deseado y se instala en el mismo día. Además, está creada utilizando materiales resistentes y de calidad, como la madera, la mejor solución para el menor impacto en el medioambiente.
Sobre su diseño, la compañía explica que Liten «es una casa personalizable, ya que se puede elegir entre diferentes acabados según las preferencias del comprador».
La firma arquitectónica, Onarc, su creadora, es una joven empresa valenciana, que apuesta fuertemente por la vivienda sostenible y eficiente. Su primer diseño, Liten, es una cabaña de madera perfecta para el fin de semana perfecto en la naturaleza.
En los últimos años, el diseño se mezcla cada vez más con las soluciones más sostenibles, una filosofía que ejerce Onarc. «Este tipo de vivienda sigue las mismas normas urbanísticas que cualquier tipo de edificación «, explican desde el estudio.
‘Cube’
Instalan más de mil metros cuadrados cada mes. Ese es el escalofriante dato de la empresa Cube, especializada en el diseño de casas transportables, creada hace una década en Carballo, en la provincia de La Coruña.
«Usamos materiales de última generación para que las viviendas Cube sean más eficientes que una construcción convencional en todos los aspectos: tanto a nivel de aislamiento térmico y acústico, como a solidez estructural, resistencia a impactos, fisuras o humedades».
«Las casas Cube superan las exigencias mínimas de edificabilidad para obtener licencia de uso residencial, con niveles de eficiencia energética que apenas se alcanzan en edificaciones comunes», explican desde la compañía.
Cube es otra de las compañías líder en España fabricación modular. Un proceso consiste en el ensamblaje de distintos componentes en fábrica conformando módulos movibles que posteriormente son transportados y rematados en su ubicación definitiva.
«Somos, en nuestro caso, bienes inmuebles y se montan con licencia de obra «, aclaran desde la empresa en Galicia. «La mayoría de los pedidos son para casas en el campo unifamiliares», señalan.
A partir de estos módulos se pueden realizar distintas configuraciones de edificaciones eficientes en plazos más cortos que la construcción convencional. Esa es la clave del éxito.
Portátiles
Dicen los expertos que las casas portátiles, como tal, pueden ser el futuro de la vivienda: por la gestión del espacio, por su integración con la naturaleza, su menor coste y el escaso trámite burocrático que necesitan si no son de instalación fija y permanente.
Además, son siempre sostenibles: tanto en los materiales como en su autogestión de consumo de energía y agua, que no es alto.
Este tipo de vivienda se considera bien mueble, las portátiles, por lo que no se puede constituir una hipoteca sobre ella.
A diferencia de las modulares industrializadas permanentes. La mayoría, son hogares completamente equipados y que se llevan en camión a cualquier lugar.
De la fábrica al campo en corto espacio de tiempo y respetando el medio ambiente. ¿Desaparecerá la construcción tradicional ladrillo a ladrillo con el tiempo?