Leo Messi ha sido visto en Barcelona, concretamente, en el estadio Camp Nou. Los rumores se han disparado cuando el argentino ha publicado en sus redes un post fijo, en el interior del campo, con un texto que dice: «Anoche volví a un lugar que extraño con el alma. Un lugar donde fui inmensamente feliz, donde ustedes me hicieron sentir mil veces la persona más feliz del mundo. Ojalá algún día pueda volver, y no solo para despedirme como jugador, como nunca pude hacerlo…». La publicación ha hecho saltar las alarmas y, si esto sucede, tendría que dejar su vida en Miami, en especial, su impresionante mansión.

Cuando el jugador se mudó a la ciudad costera de Estados Unidos en 2023, por su nuevo fichaje por el Inter Miami, después de haber pasado por el PSG de Francia, comenzó a hacer su vida allí con su mujer, Antonela Rocuzzo, y sus hijos. Además de convertirse en su nuevo hogar, el futbolista también amplió sus negocios inmobiliarios en la ciudad, puesto que el auge de esta se encuentra en aumento, de tal manera que comienza a superar a Nueva York, tanto en coste de vida como en renta per cápita.
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Sabemos que, en cuanto a su familia se refiere, Leo Messi no escatima en gastos y siempre ha apostado por construcciones imponentes, como la que tenía en Barcelona cuando jugaba en el equipo blaugrana. Situada en Florida, más en concreto, Fort Lauderdale, se trata de una construcción con una arquitectura típica de la zona, en la isla privada de Bay Colony (la misma en la que Tom Cruise tiene una de sus propiedades), con vigilancia 24 horas y unas vistas incomparables al mar.

La casa de Leo Messi se encuentra bordeando el mar, la cual ocupa 975 metros cuadrados. Los interiores son bastante amplios y cuentan con mucha luz, puesto que está rodeado de grandes ventanales. Los suelos de madera se convierten en protagonistas, al margen de otras casas del área, que suelen ser de mármol o piedra, puesto que guardan mejor el frío ante las calurosas temperaturas que hay en la zona a lo largo del año.

Comenzamos con un amplio salón, el cual se encuentra en concepto abierto, conectando con la cocina. Construido a dos alturas, la zona de estar cuenta con un amplio sofá, algo imprescindible para Leo Messi, puesto que una de sus actividades favoritas es descansar y disfrutar de un tiempo en familia.

La cocina de diseño italiano es bastante amplia y hace fácil el paso de todo aquel que esté de visita. Está preparada para que cualquier chef privado pueda cocinar platos increíbles y, en su isla central, tiene capacidad para sentar a seis personas. Los panelados de madera dan personalidad a este espacio, mezclándolo con las encimeras de mármol y los electrodomésticos integrados, lo cual aporta una armonía visual para el lugar.

En cuanto a las estancias de descanso, cuenta con 10 dormitorios y nueve baños, muchos de ellos hechos incorporados. Entre estas, destaca la suite principal, la cual cuenta con 150 metros cuadrados y una doble puerta de entrada. Además de una cama king size, vemos un sofá y una amplia butaca, perfectos para esos momentos de lectura o ver una película en privado. Lo mejor es el ventanal con el que cuenta, que tiene unas vistas directas al mar y a los dos muelles de 51 metros que rodean la propiedad. También hay con un vestidor, donde estamos seguros de que Leo Messi guarda su tesoro más preciado: sus relojes.

Aunque tenga el mar a escasos metros, en la zona exterior no puede faltar una piscina, con tumbonas para poder tomar el sol mientras se pasa un rato en familia o con amigos. Además de esto, también se puede encontrar un spa, un gimnasio interior, oficina privada e incluso un garaje propio con capacidad para tres coches. Un edén que al futbolista le costó casi 10 millones de euros y que, si finalmente vuelve al Fútbol Club Barcelona, tendrá que vender o alquilar. La cuestión es si, por el mero hecho de haber vivido él ahí y las implementaciones que ha llevado a cabo, podrá lanzarla al mercado por tres o cuatro millones más o rentarla por cinco cifras altas, mensuales.
