Pasear por la calle y admirar la arquitectura que te rodea es un reflejo que hacemos cada día, pero no nos damos cuenta. La belleza del diseño de los edificios puede ser algo intrigante y fascinante al mismo tiempo. Madrid, París, Nueva York, Dubái… Piensa en todos los destinos que has visitado y que has mirado al cielo contemplando el pulido recorrido de una construcción que acaricia el cielo con sus magníficas líneas. Lo mismo pasa con las casas de diseño. Hemos evolucionado del clásico ladrillo a las emociones arquitectónicas que nos dejan atónitos en su presencia. Puede que hayamos inventado un nuevo término, pero la palabra construcciones se les queda pequeña, ya que emoción es lo que provoca visualizar tan magníficos diseños. Pocos son los arquitectos que estimulan esa parte visual, pero hay uno, a unos pocos kilómetros de la capital, que lo consigue. Valencia es la ciudad donde reside, pero sus diseños son reconocidos por todo el mundo. Por ello, vamos a hablar del estudio de arquitectura Fran Silvestre Arquitectos y descubrir una de sus últimas obras, una villa de autor llamada Soul Luxury Beach Resort.
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Ubicado en el norte de Egipto y conectada con la plenitud de la naturaleza, el cliente cedió absoluta libertad al estudio, bajo una amplia lista de necesidades que se debían llevar a cabo. El resultado de esta circunstancia es este edificio inspirado en una esfinge. Con formas sinuosas, a pesar de no contener curvas, es una reinterpretación contemporánea de las maravillas arquitectónicas de antiguo Egipto. Un edificio rinde homenaje a la anterior y él encara el futuro, desafiando los límites de la arquitectura convencional.
Con el proyecto, en la actualidad, en pleno desarrollo y con objetivo de finalización en el año que entra, el equipo de Fran Silvestre Arquitectos ha proyectado un gran volumen que incluye dos plantas y un tejado plano a quince metros de altura. Este gran volumen se une a otro edificio que se encuentra en la parte inferior a 15 metros del suelo. Al verla desde el lateral, da la sensación de estar sujeta por una única línea de hormigón de menos de 30 centímetros de grosor. Fran Silvestre contaba a la revista Architecture&Design que «Al considerarlo como una sola pieza, el fuste vertical permite que la longitud de la parte inferior actúe como contrapeso estabilizador para el soporte superior».
La ligereza de la estructura esconde una gran casa enteramente de diseño. En el cuerpo inferior contará con tres niveles (dos plantas y un sótano) y se encuentran las partes más importantes de la casa. En ella se incluyen, nada más y nada menos que, diez dormitorios, incluidos dos suites principales, dos cocinas, varios salones, un spa e incluso establos para caballos. A pesar de estar ubicada el exterior de la planta baja contará con una gran piscina en un jardín.
En el cuerpo superior se incluirá un impresionante dormitorio en suite completamente independiente con paredes formadas por cristaleras para admirar el entorno con vistas 360% del mediterráneo.