La música debería estar siempre en nuestras vidas. Por eso los escenarios, los teatros, las casas de música… No deben faltar en cualquier ciudad. La capital de Hungría, Budapest, ha estrenado la suya. Un impresionante edificio firmado por un arquitecto japonés que va a hacer disfrutar a todos aquellos que vayan.
Városliget, como lo conocen los locales, se encuentra en el parque más grande y más icónico de Budapest. Un edificio diseñado por el arquitecto japonés Sou Fujimoto de estilo contemporáneo. Un edificio de 9.000 metros cuadrados que están divididos en tres alturas. «Ha sido confeccionado como una extensión de su entorno natural mediante volúmenes acristalados ininterrumpidos y una estructura de techo perforada, creando una experiencia visual inimitable para los visitantes, como si todavía estuvieran caminando por la naturaleza del parque», nos explican.
Un proyecto arquitectónico que crece, que se mezcla en la naturaleza, como un gran bosque en mitad del parque. Una experiencia arquitectónica única que mezcla diseño y música. ¿Y cómo se realizó? Con 94 paneles fabricados a medida, algunos de ellos con una altitud de hasta 12 metros. Y para crear esa sensación de bosque, miles de hojas que están suspendidas que aportan un toque dorado… Como si fuera otoño siempre. Pero la naturaleza sigue presente: hay un dosel orgánico y flotante que simula ser una ola del mar.
«Una de las particularidades de este proyecto es que no hay ángulos rectos en el techo, solo formas onduladas, y la superficie está perforada por unos 100 agujeros en forma de cráter, que canalizan la luz del día hacia el interior y crean un ambiente de lo más único y especial», nos confirman. ¿Y qué hay en la Casa de la Música? Salas de conciertos, un escenario al aire libre y muchas salas de exposiciones. Cultura y música por todas partes.
Un archivo digital de documentos vinculados a la historia de la música popular húngara, salas de educación musical, una terraza en el parque, salas de exposiciones -temporales y fijas-, una cúpula de sonido, una biblioteca multimedia, un club… Rincones especiales, diseñados por Sou Fujimoto para hacer disfrutar a todos los habitantes de Budapest. Y por supuesto, un edificio que es sostenible, que igual que acoge la naturaleza en su esencia también la respeta. Por último, la Casa de la Música, forma parte de uno de los proyectos más ambiciosos de Europa: el desarrollo urbano y cultural más grande del continente que ha empezado por este edificio musical.