Sotograndre, Marbella, La Zagaleta, Milán, Nueva York, Miami… es gran parte del lienzo de Ark Architects. Este estudio, que ha cautivado nuestros ojos y el de todos los amantes de la arquitectura que admiran la luz, la naturaleza y la sostenibilidad, ha diseñado y construido algunas de las villas más exclusivas dentro y fuera de nuestras fronteras donde la razón y la emoción juegan su gran baza. Hablamos con Manuel Ruiz Moriche, arquitecto y socio de ARK Architects para descubrir los cimientos, el savoir faire, de la empresa, que lleva más de 25 años construyendo sueños. Auténticas obras maestras donde la luz, la ubicación, los materiales, el entorno y la creatividad son su gran máxima.
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La manera que tiene ARK Architects de abordar un nuevo proyecto es global, ellos diseñan y construyen. «Últimamente nos han definido como ‘artesanos de la arquitectura'», señala Manuel Ruiz Moriche, arquitecto y socio de ARK Architects, para explicar el nivel de dedicación del estudio, que guía a su cliente desde la ubicación del terreno hasta la entrega de la villa llave en mano.
«Un arquitecto hace cierta labor psicológica», explica Manuel insistiendo en que es importante que el cliente se deje asesorar. «Tenemos que pensar como él para hacer realidad ese proyecto con el que sueña, pero que no puede desarrollar por sí mismo. Es una relación compleja porque nosotros somos el vehículo para materializar su gran proyecto soñado».
«Somos constructores de ideas, materializadas precisa y eficientemente»
Pregunta: ¿Cómo se consigue el equilibrio entre el sueño cliente y la realidad? ¿Dónde están los límites?
Respuesta: Todo proyecto arquitectónico da respuesta a una serie de cuestiones: Tenemos un lugar concreto en el que intervenir, un cliente que tiene sus necesidades y deseos, un presupuesto y un programa que cumplir, y nuestro trabajo es conseguir dar respuesta a todas las cuestiones que emanan de ellos.
Lo que yo propongo con mi trabajo son experiencias que van a provocar un cúmulo de sensaciones. Es una arquitectura pensada por y para el ser humano que la habita, que logra mejorar su vida cotidiana para que alcance algo aún más sublime: la felicidad de esas personas.
Cuando conseguimos que el cliente entienda que estamos luchando por sus intereses, adaptándonos a sus necesidades y creando un proyecto que le aporta lo que él tiene en mente, la relación fluye sin problema.
«Se puede vivir en una villa de alto nivel pero hacerlo en una obra maestra pensada hasta el último detalle para adaptarse a ti, es algo único y especial»
P: ¿Cuál es el ADN de ARK A.? Es decir, aquello que os diferencia y es único de vosotros.
R: En ese A-D-N hay tres áreas principales. El área más tangible es que somos tres socios: Dos arquitectos técnicos, Diego Suárez Jurado y Santiago Ruiz Moriche, que se ocupan de las fases de dirección y construcción; y yo, Manuel R. Moriche, que me encargo de la fase creativa. Detrás hay un gran equipo que engloba a profesionales desde la arquitectura al diseño e interiorismo, pasando por la ingeniería y el paisajismo, llegando hasta la neurociencia.
Para nosotros, la arquitectura es la idea construida y por eso abarcamos todas las fases del proyecto. Somos constructores de ideas, materializadas precisa y eficientemente. Finalmente ofrecemos una solución global, permitiendo que el cliente solo contrate a una compañía que le da más de 10 años de garantía global.
Otra es nuestro entendimiento de la luz, la naturaleza y el lugar. Significa que entiendo la arquitectura desde un punto de vista en el cual el lugar resulta determinante a la hora de realizar un proyecto. El entorno y, por tanto, la naturaleza, es el punto de partida desde el que el que comienza el análisis y genera todo lo demás; por eso es esencial a la hora de proyectar, pues el lugar natural guarda el germen de cualquier proyecto. No concibo un diseño sin hacer que los edificios dialoguen con el entorno, que interactúen con la naturaleza.
Y por último y no menos importante, nuestro cliente. El ser humano está en el centro de todo y es el origen de porqué podemos crear un proyecto. Con más de 230 proyectos ejecutados, nuestro nivel de dedicación al detalle y de servicio ha de ser máximo. Crear una casa es algo más que fabricar una estructura y facturar por metro cudrado, es crear tu lugar seguro. Se puede vivir en una de las villas más exclusivas de alto nivel pero hacerlo en una obra maestra pensada hasta el último detalle para adaptarse a ti, es algo único y especial.
«Hace doce años empezamos a construir villas que evolucionaron el concepto de cortijo andaluz a un tipo de vivienda más moderna, sostenible»
P: ¿Cuál es la construcción que ha marcado un antes y un después en ARK A.?
R: Hay dos proyectos casi simultáneos que marcaron un antes y un después. Uno de ellos en la urbanización de La Zagaleta y otro en Sotogrande, hace unos 12 años. El mercado de estas zonas se mantenían con propiedades de alto nivel pero sin una arquitectura que fuese más acorde con el estilo de vida moderno.
En ambos casos nos arriesgamos, diseñamos y construimos villas exclusivas que evolucionaban el concepto de cortijo andaluz a un tipo de vivienda más moderna, sostenible, equilibrada con el entorno, huyendo de líneas demasiado rupturistas y de ‘cubos’ modernos, nos focalizamos en crear hogares modernos y de alto nivel. Sin falsa modestia podemos decir que tras estos proyectos el mercado se unió a esta tendencia. De alguna manera, las personas interesadas en este tipo de arquitectura reconocen fácilmente cuando es una villa de ARK.
P: ¿Cuáles son las tendencias más solicitadas este 2023?
R: Es una pregunta muy interesante porque creo que, en el fondo, la arquitectura no es una cuestión de estilos, ni siquiera de tendencias o modas. La arquitectura puede ser coherente o no serlo, independientemente del lenguaje formal que estés utilizando, eso que llamamos estilo. Para ser buena tiene que ser coherente, fiel y estar bien construida porque arquitectura es eso: idea construida. Pero, igual que los seres humanos tenemos cada uno una forma diferente de hablar, también cada arquitecto utiliza un lenguaje formal diferente para expresarse y realizar cada proyecto. En cada obra de arquitectura, cada uno pone su sensibilidad y su forma de expresión.
Siempre digo que me gusta diseñar casas que parecen jardines y jardines que parecen casas, poder recrear esa sensación de estar viviendo en el entorno. También estamos notando que se esta provocando una migración paulatina de las ciudades a zonas residenciales de baja densidad de población y, sobre todo, muy rodeados de naturaleza. El gusto del ciudadano va cambiando, volviendo un poco a los orígenes.
Por otro lado, ya llevábamos años viendo, pero ahora, mucho más, que las personas cada vez están más sensibilizadas con la sostenibilidad, la protección al medio ambiente, quieren comprometerse por un estilo de vida sano. Y en eso está basada nuestra filosofía: en apostar siempre por la eficiencia energética, materiales sostenibles, ventilación adecuada, etcétera.
«Deberíamos dejar de pensar en la arquitectura como algo selecto o elitista: Es un patrimonio cultural de todos»
P: ¿Cómo afecta el lujo silencioso en la arquitectura?
R: El lujo moderno ha sufrido una revolución y ha abandonado los grandes niveles de ostentación. La arquitectura centrada en la vivienda unifamiliar de alto nivel posee parámetros evolucionados que están más relacionados con el espacio, la funcionalidad, la sostenibilidad, el equilibrio de los materiales, la artesanía y el poder hacer a medida cada espacio, eligiendo hasta el último detalle de manera que no sea algo estándar o industrializado. Deberíamos de dejar de pensar en la arquitectura como algo selecto o elitista: es un patrimonio cultural de todos, es parte de nosotros, de nuestra ciudad y está bien que reflexionemos más sobre ello.
P: ¿Cómo abordáis el reto de la sostenibilidad en vuestras villas exclusivas?
R: Nos encargamos de integrar este concepto a través de varios puntos fundamentales. El más importante viene de la mano del propio diseño de la vivienda en comunión con el entorno. Es indispensable que la vivienda se encuentre perfectamente integrada en el lugar; de hecho, entendemos la arquitectura desde el emplazamiento, que es donde se esconde el germen del proyecto. Una vivienda nunca podrá ser igual que otra, pues cada una es específica de un lugar concreto, cuyas características ya han sido convenientemente analizadas para un diseño completamente adaptado a sus condiciones medioambientales, climáticas o paisajísticas. De esta forma, el proyecto nace sostenible desde su base.
Otros puntos son la impermeabilización y aislamiento térmico y acústico, los sistemas de drenaje de agua, el retorno del agua de lluvia para su uso en riego, uso de plantas naturales y autóctonas, conservación de las existentes, utilización de superficies permeables para reducir la escorrentía, permitiendo que el agua se filtre a través de la capa freática local y / o los acuíferos, la elección de materiales puros, una construcción eficiente energéticamente, las carpinterías de aluminio, vidrios tratados y con control solar…
P: ¿Hay alguna construcción en particular que haya supuesto un auténtico reto?
R: Quizás sea un tópico pero todas son un reto. Nos enfrentamos a diferentes topografías, necesidades, gustos, funcionalidades, orientación, localizaciones, etc. La clave es estar en la búsqueda constante de mejora y con una sensación de que siempre se puede evolucionar. Nuestros diseños de hace cinco años son diferentes a los de ahora aunque mantienen su esencia y filosofía, pero las personas, el estilo de vida y el entorno también evolucionan. En ARK tenemos la ventaja de que nuestros proyectos son integrales, por lo que controlamos toda la fase del proceso. Todo nace desde un análisis del lugar, el estilo de vida y por supuesto de un diseño.
«La luz en las zonas que construimos posee casi materialidad por su intensidad y fuerza, hay que jugar con ella constantemente y casi domarla»
P: ¿Cuáles son lo materiales que más utilizáis en vuestras villas exclusivas?
R: Los materiales son el medio de expresión arquitectónica, lo que hace posible que las ideas puedan convertirse en arquitectura. Siguiendo con nuestra filosofía sostenible, utilizamos solamente materiales naturales, como piedra, madera sin procesados químicos, materiales sin adulterar, incluso las pinturas están hechas con base de cal, para favorecer una vida saludable en el interior de nuestras villas exclusivas.
Los materiales tienen que expresarse de la forma más pura posible, un pilar también muy importante para lograr la sostenibilidad en nuestros proyectos.
P: La luz, ¿qué importancia tiene en vuestras construcciones?
R: La luz es el elemento central de la arquitectura, la arquitectura no puede existir sin ella. En cada espacio, existe una luz concreta con diferentes características que hay que aprender a manipular y a gestionar para que el proyecto tenga coherencia y podamos llegar a los niveles de sensibilidad que buscamos.
«Cuando me expreso a través del jardín necesito disponer de un lenguaje y el único que tengo es la geometría, que es el lenguaje de las formas»
P: ¿Y la naturaleza, qué papel juega?
R: En ARK tenemos la suerte de actuar en parcelas privilegiadas genéticamente, en espacios muy grandes ubicados en entornos naturales con un ADN muy potente. Nuestra obligación y nuestra necesidad es dialogar con la naturaleza.
Los jardines de ARK tienen una fuerte componente geométrica porque cuando me expreso a través del jardín necesito disponer de un lenguaje y el único que tengo es la geometría, que es el lenguaje de las formas. Este es el motivo de que utilice tantas formas geométricas en los jardines, que para mí son una prolongación de los espacios construidos. Sentir que estás viviendo en un jardín es una idea que me atrae mucho.
P: ¿En qué proyecto estáis trabajando actualmente? ¿Y qué será lo próximo?
R: Estamos construyendo villas exclusivas en La Zagaleta, Marbella y Sotogrande, y diseñando tanto aquí como en otras zonas de España y Portugal. Nuestro germen es la Costa del Sol y estamos especializados en vivienda residencia unifamiliar y estamos centrados en eso.
Cada proyecto se diseña y se construye en ARK y controlamos toda la fase protegiendo a nuestro cliente en todo momento. Esto nos limita a poder realizar de 8 a 10 proyectos al año pero es el modelo que nos gusta y que mantiene la esencia de ARK.
Es un orgullo siendo una empresa que ha nacido en Andalucía, exportamos la marca España por el mundo. Para ello, y no perder nuestra esencia, tenemos un equipo interno pero independiente para los proyectos internacionales que solo realiza la fase de diseño, de esta manera se han realizado proyectos en Miami, New York, Cascais y Milan.
«En cada proyecto buscamos la personalización, la emoción, la generación de experiencias únicas dentro de la vivienda»
P: El estudio comenzó hace 25 años, ¿cómo ha evolucionado la arquitectura y el diseño de interiores de las villas exclusivas, y qué es lo que permanece?
R: En 25 años la sociedad ha ido cambiando y cada vez más rápido por ello nos hemos ido a adaptando. Cada nacionalidad y lugar es diferente y en cada proyecto buscamos la personalización, la emoción, la generación de experiencias únicas dentro de la vivienda.
Sin olvidar la fuerte evolución tecnológica en todos los sectores. Nosotros apostamos por un “lujo sostenible” propio del siglo XXI. La innovación es una constante en la compañía, en la que hemos visto evolucionar todas las herramientas de software. La realidad virtural, la impresión 3D, la metodología BIM… pero sin perder la perspectiva de que somos artesanos de la arquitectura en el desarrollo de cada vivienda.
Ha incrementado la demanda de dispositivos tecnológicos y estamos convencidos de que nos encaminamos hacia una hibridación entre la persona, la villa y la tecnologías.
