El coleccionismo de lujo no es solamente una afición, sino que es una forma de invertir en aquellos elementos que con el tiempo sabemos que se van a revalorizar. Los fanáticos del motor siempre buscan esos diseños que son de edición limitada o que hayan pertenecido a un icono que con sus propias líneas en los libros de historia. Pero también están, por otro lado, los amantes de las complicaciones, cuyo objetivo es conseguir piezas que sean únicas dentro de un universo que pelea por destacar. Estos nunca van a dejar de surgir y el último se lo hemos visto al piloto Lewis Hamilton.
Después de muchos años con Mercedes-Benz en el mundo de la Fórmula 1, el aclamado piloto se ha unido a la escudería de Ferrari, cambiando de casa y estrenando temporada. El británico disputó su primera carrera con la escudería italiana en el Gran Premio de Australia, delante de un público que ovacionaba y vitoreaba esta nueva incorporación, justo en el momento en el que apareció vestido con el mono rojo característico de la marca.
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Lewis Hamilton se ha convertido en todo un icono y ya no sólo el mundo del motor, sino que también despunta en la moda. El claro ejemplo es su reciente presencia en la MET Gala, donde Anna Wintour le invitó a ser uno de los anfitriones de la noche en la mesa oficial. El británico, que disputó su primera carrera con la escudería italiana en el Gran Premio de Australia, no ha perdido su esencia y siempre se acerca a hablar con el público y a firmar autógrafos. Ese fue el momento en el que le vimos con un exclusivo reloj que no pasa desapercibido.
Aunque siempre le hemos visto con diseños de IWC, el cambio de escudería también trae consigo accesorios nuevos y las creaciones de Richard Mille se incorporan a su colección. Muchos lo sabrán, pero los que no, la marca suiza, fundada en 2001 por Dominique Guenat y Richard Mille, es desde hace tiempo socia de la escudería Ferrari. Para su primer Gran Premio en Australia, Lewis Hamilton lució un modelo totalmente nuevo: el RM 74-02 Automatique Tourbillon.
La estética del reloj es singular y cuenta con una caja que combina el TPT Quartz de Richard Mille con un exclusivo y complicado de crear oro rojo, el cual cobra un tono rosáceo muy atractivo dependiendo de la luz. La esfera tiene un aspecto futurista y tridimensional, que permite distinguir especialmente el tourbillon.
Este modelo no está al alcance de cada uno y es que pertenece a la categoría híper premium, lugar donde la marca coloca sus diseños más singulares. Entre sus varias características, cuenta con una reserva de marcha de 50 horas, además de una alta resistencia.
Para suerte de los coleccionistas, este modelo no sólo lo va a tener Lewis Hamilton, sino que han decidido sacarlo a la venta y, por 550.000 euros, puedes llevar el mismo reloj que conduce la nueva estrella de la escudería Ferrari.
