Joyas con diamantes de laboratorio tan bellos como los diamantes naturales
Los diamantes cultivados en laboratorio están ganando terreno en el mundo de la alta joyería, sobre todo entre los que desean un consumo responsable y sostenible. Al ser creados en entornos controlados en lugar de ser extraídos de la tierra, la trazabilidad y el origen ético de los diamantes de laboratorio son más fáciles de verificar. Tal es la apuesta por estas piedras preciosas que firmas como Louis Vuitton ya han invertido en esta nueva manera de hacer alta joyería. El pasado año, la maison invirtió en la compañía de diamantes cultivados en laboratorio Lusix, y hace unas semanas presentó sus primeros diamantes cultivados que ha utilizado Fred Jewelry en una colección muy especial. Os mostramos estas y otras joyas con diamantes de laboratorio hechas en España.
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Fred
La marca de alta joyería parisina Fred, propiedad de LVMH, es conocida por sus refinadas creaciones y acaba de presentar «el primer diamante azul cultivado en laboratorio, el primero en la historia de la casa». Recibe el nombre de ‘Fred Audacious Blue’.
El diamante es de 8,88 quilates, pero también ha creado otros cuatro de menor tamaño, de 0,5 quilates cada uno, formando un exclusivo conjunto de alta joyería ‘Force 10 Duality’.
«En cada pieza, los diamantes azules cultivados están engastados con diamantes blancos naturales. Fred señala que es «la unión perfecta entre tradición y tecnología».
Cada piedra ha sido clasificada por el Instituto Gemológico de América y cortada en el ‘Hero Cut’ de 36 facetas patentado por la marca. El diamante de 8,88 quilates se puede ver durante este mes en la tienda de París, Rue de la Paix, después iniciará un viaje con paradas en Seúl y Corea del Sur.
Vrai
Vrai es la marca de Diamond Foundry que, en 2014, se creó en Los Ángeles. Ahora está en Madrid pero los diamantes se crean con cero emisiones en EE.UU. con energía hidroeléctrica 100%. «Las consecuencias de la minería se conocen desde hace siglos, no somos los primeros en decirlo, pero sí en aplicar un cambio de esta envergadura en el sector», señalan responsables de la marca.
Vrai ofrece la posibilidad de diseñar joyas personalizadas a través de un proceso creativo junto con sus artesanos. Engastes, talla, colores, gamas de quilates… son las variables que ofrecen.
Rêver
Rêver nació hace tan solo dos años también con la necesidad de reinventar la industria de la alta joyería para hacerla «más transparente y circular», señalan responsables de la marca. Sus piezas están hechas con diamantes creados en laboratorio y oro reciclado.
Su fundadora, Marta Peñalver, señala que «los diamantes cultivados en laboratorio tienen esencialmente la misma composición química, estructura cristalina y propiedades ópticas y físicas que los diamantes extraídos de las minas.
La única diferencia con los diamantes naturales es su punto de origen, «en el suelo para un diamante extraído, sobre el suelo para un diamante cultivado en laboratorio».
Como parte de su compromiso, Rêver trabaja sólo con oro macizo reciclado de 18 quilates. También ofrece la posibilidad de personalización.
Mimoke
Mimoke es otra marca española que cultiva diamantes de laboratorio para crear estas preciosas joyas.
«Todo comienza por una pequeña semilla de carbono puro, colocada en un entorno de laboratorio controlado, utilizando tecnologías punteras que replican y mejoran las condiciones naturales de crecimiento de los diamantes», explican responsables de la marca y añaden que «el diamante de laboratorio crece de forma natural en tiempo récord, en 6 o 7 semanas, y con una huella de carbono muy reducida».
Su fundador, Sergio Murcia, viene de familia de joyeros y es experto cualificado en diamantes, en 2019 se lanzó al mundo de la alta joyería con este espíritu ético.