«Mi sueño es ganar Wimbledon», aseguró Carlos Alcaraz en un torneo a los pies de la Torre Eiffel con doce años. Este domingo, 16 de julio, aquel niño cumplió su gran sueño. Con el reloj de partido marcando las 4 horas y 43 minutos, el tiempo se paró para los Alcaraz, cuando un revés de Djokovic se fue a la red. Fue en ese momento cuando Carlos Alcaraz se convertía en el quinto español campeón en el All England Club. Siendo Wimbledon apenas su cuarto torneo en la superficie y hace un mes la primera vez que alcanzó unos cuartos de final en hierba, el tenista mostró su vertiginosidad y precocidad. Alcaraz celebraba ayer su nueva victoria elevando al cielo de Londres el trofeo de Wimbledon, y luciendo un impresionante reloj que llevaba en su muñeca. Otra joya de la firma con la que colabora el tenista, Rolex, y que también ha sido objeto de multitud de miradas a la hora de levantar su premio.
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El reloj de Alcaraz en Wimbledon
El modelo de reloj que lució Carlos Alcaraz tras la final contra Djokovic en Wimbledon es un Cosmograph Daytona 116518LN Meteorite Dial Yellow Gold Oysterflex valorado, según la propia firma, en unos 30.550 euros.
Hablamos de un reloj elaborado con oro de 18 quilates, que tiene bisel Cerachrom y cuya particularidad radica en su brazalete Oysterflex.
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Se trata de una pieza desarrollada y patentada por Rolex, que combina la robustez con la ergonomía. De hecho, está formado por dos láminas metálicas curvas y flexibles sobremoldeadas con elastómero negro de alto rendimiento.
En cuanto a sus características técnicas, es un reloj con una esfera dorada y negra, con contadores e índices de hora con apliques en oro. Tiene también manecillas con pantalla Chromalight, un material luminiscente de alta legibilidad.
Una pieza que se fabrica solo con los metales más puros, y que se inspecciona meticulosamente en un laboratorio interno con equipos de última generación, antes de que el oro se forme y moldee con la misma atención minuciosa a la calidad.
Además, se trata de un reloj que parece servirle también de amuleto, pues ya lo lució cuando se llevó el US Open en el año 2022, y que ahora ha vuelto a lucir en Wimbledon.