En 1966, Porsche dio un salto decisivo en el mundo de la competición con el nacimiento del Porsche 910, un modelo desarrollado específicamente para las carreras de resistencia. También conocido como Carrera 10, este coche de carreras fue una evolución directa del 906, incorporando mejoras clave en aerodinámica, peso y tecnología, como el uso de llantas de magnesio y una caja de cambios más eficiente. Se produjeron apenas 29 unidades, lo que lo convierte en una auténtica joya para coleccionistas y aficionados del automovilismo clásico. A los mandos del 910 se sentaron nombres ilustres como Jo Siffert, Hans Herrmann y Gerhard Mitter, que llevaron al coche a la victoria en pruebas míticas como la Targa Florio o Nürburgring. El 910 no sólo cimentó la reputación de Porsche en las pistas, sino que allanó el camino para los futuros iconos de la marca en el mundo de la resistencia. En la actualidad el primer Porsche 910 de carreras que construyó Porsche se encuentra a subasta por un millón de euros.
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Porsche 910: El inicio de una leyenda en los circuitos
El 910 fue pilotado por Vic Elford, Bill Bradley, John Fitzpatrick, Tony Dean y Gijs van Lennep entre 1968 y 1969. Ganó su categoría en los 1.000 Kilómetros de Spa de 1969, fue duodécimo absoluto en los 1.000 kilómetros de Nürburgring de ese mismo año y fue conservado por el equipo Bradley durante 30 años para ser restaurado posteriormente por Paddy O’Grady y acabar en el estado de concurso que puedes observar en las imágenes.
Las primeras unidades del 910 contaban con carrocería Spyder descapotable y un motor Tipo 771 de ocho cilindros para carreras de montaña. No obstante, las unidades destinadas a carreras de resistencia se conformaban con los 220 CV del más fiable motor 901/21, igualmente de 2,0 litros pero con solamente seis cilindros.
El primer Porsche 910 de carreras por un millón de euros
Recientemente, una de las unidades más emblemáticas del Porsche 910 ha sido restaurada y puesta a la venta. Este modelo, que perteneció a figuras legendarias como Niki Lauda y Helmut Marko, es una pieza única que representa la esencia de la ingeniería y el diseño de Porsche en su época dorada. Su restauración ha devuelto al vehículo a su esplendor original, conservando detalles históricos que lo hacen aún más valioso para los coleccionistas y entusiastas del automovilismo.
La subasta de este 910 restaurado ha generado gran expectación en el mundo del motor, con expertos y aficionados anticipando un precio que podría superar el millón de euros. Este evento no sólo destaca la importancia histórica del modelo, sino también el continuo interés y aprecio por los vehículos clásicos que han dejado una huella imborrable en la historia del automovilismo.
