SolarImpact es un yate con placas solares para aquellas personas apasionadas del mar que desean navegar largas distancias sin sacrificar el confort, la elegancia y la tecnología punta. Este superyate sin duda te hará vivir una emocionante experiencia llena de estilo a la vez que respeta la naturaleza.
Viajes relajados y de lujo
No hay duda de que todos los sectores necesitan trabajar en alternativas sostenibles y ecológicas que ayuden al medio ambiente, incluido el náutico. La compañía suiza SolarImpact Yacht se une a esto y presenta este extraordinario yate de lujo capaz de navegar las 24 horas del día, siete días a la semana. Puede alcanzar una velocidad máxima de 5 nudos siempre que la luz del sol sea la adecuada, ya que utiliza la energía solar para navegar.
De cara al futuro, la compañía pretende ofrecer toda una nueva generación de embarcaciones respetuosas con el medio ambiente. Y es que su superyate con placas solares no solo impresiona por su innovador suministro de energía, su atractivo diseño y su propulsión eléctrica, también por ser líder en comodidad a la hora de navegar.
Todos los sistemas a bordo pueden usar el sol como fuente de energía siendo, a parte de respetuosos con el medio ambiente, completamente silenciosos.
El diseño
El elegante diseño de este yate que navega con energía solar lo convierte casi en una residencia con vistas al mar. En su interior las acogedoras salas de estar, los amplios camarotes y el exclusivo diseño de todas las estancias hacen que pasar tiempo a bordo sea un auténtico placer. Cada una de ellas presenta un sofisticado concepto de iluminación y muebles ultramodernos. Los grandes ventanales ofrecen unas increíbles vistas e inundan el interior de luz.
Y no solo destacan su elegancia y su comodidad, es necesario hablar de su seguridad y su diseño exterior con una forma perfecta para navegar largas distancias en todas las condiciones del mar. Dividida en tres niveles de 24 metros de eslora y 10 metros de manga, la embarcación cuenta con un total de 220 metros cuadrados de espacio habitable. ¿Qué más se puede pedir a un superyate que navega con placas solares?
