Italia es uno de los países más especiales de Europa… y del mundo. Cualquier rincón del país es un buen viaje, es una maravillosa escapada. En Puglia, en la Costa Amalfitana, en Roma… Y en el norte, en Lombardía, el lago di Como. Muy cerca de Milán encontramos este lago tan especial que se convierte en un magnífico plan en cualquier momento. ¿Y qué podemos hacer? Coger una Riva y recorrernos el lago.
Y es que montarnos en una Riva es la mejor experiencia que podemos vivir, porque es la mejor manera -valga la redundancia-, de disfrutar de la belleza que encontramos a nuestro alrededor.
El paisaje alpino que se disipa, los palacios de su orilla, la sofisticación que se respira en el ambiente… El lago di Como es un rincón singular y un paseo en una Riva es la mejor manera de descubrirlo.
Es el tercer lago más grande de Italia, y en sus orillas, además de Como, encontramos Tremezzo, Cernobbio, Menaggio, Cadenabbia, Lecco, Gravedona, Bellaggio... Y entre estos pueblecitos, monumentos como Villa Carlotta, de 1747, la iglesia de Santa María de Piona… Y como te decimos, la mejor manera de descubrirlo es a través de una Riva.
Un paseo disfrutando de las vistas, una comida con vistas al paisaje, un paseo con un concierto de violín… Hay multitud de planes los que se pueden disfrutar en esta lancha clásica de madera con sillones en cuero color camel.
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No puedes ir al lago di Como sin disfrutar de una Riva y su aire vintage que demuestra que los clásicos nunca mueren. Un plan especial que lo es aun más porque el paseo es de gran belleza.
Las horas en una Riva, navegando, se te pasarán volando y el viaje será inolvidable. ¿Es probablemente montar en una el mejor plan que se puede hacer en el lago di Como? No hay ninguna duda.
