El Ferrari F355 vuelve a la vida con una edición limitada de sólo 55 unidades
El Festival de Velocidad de Goodwood ha sido testigo de un Ferrari que fue todo un hito en los años 90. Fue de los pocos coches de lujo que superó la barrera de las 11.000 unidades vendidas y, para los coleccionistas, sigue siendo un modelo aspiracional, puesto que es complicado de conseguir. Ahora, Evoluto Automobili, lo ha traído de vuelta pero con el nombre de 355, pasando por alto el nombre de la exclusiva marca italiana para evitar problemas y respetando el diseño original. Todo permanece en su sitio y sólo los faros delanteros, escamoteables, y los pilotos traseros se han modernizado con tecnología LED.
Los cambios en este diseño no son enormes, pero sí que tiene avances que lo hacen más atractivo. El restaurador ha instalado unas branquias sobre los laterales del capó y un difusor aerodinámico en la parte trasera que no terminan de encajar completamente con el estilo de este Ferrari, pero que es necesario para disponer de una mayor carga aerodinámica a alta velocidad. La estructura del cuerpo es completamente nueva, así como el chasis, que es enteramente de carbono logrando aumentar la rigidez de la estructura un 23 por ciento.
Bajo el capó de esta versión del Ferrari F355 seguimos encontrando el mismo motor, el V8 de aspiración natural, con el único cambio añadido de que los caballos son mayores y elevan la potencia a los 420CV. En cuanto a la potencia, la empresa ha desvelado que ha tenido que cambiar cerca de 200 componentes del motor para conseguir esa implementación, lo cual ha supuesto contar con nuevo sistema de gestión del motor, mejorando la parte de las bujías y las bobinas para controlar mejor la eficiencia de combustible en la cámara de combustión, además de una ignición más precisa.
El conjunto arroja un peso que no llega a la tonelada y media, con nada menos que 1.250 kilogramos, contribuyendo a ello sus frenos carbocerámicos suministrados por Brembo y sus llantas de aleación forjadas de 19 pulgadas montadas en ruedad de Michelin.
En definitiva, se han aplicado muchas soluciones refinadas con la tecnología actual, basándose en los diseños originales de los años 90. También se ha prestado especial atención al sonido del motor, utilizando un sistema de escape deportivo fabricado en aluminio, de manera que se cuida uno de los aspectos más atractivos de una mecánica Ferrari.
Cuando observamos el diseño, nos vienen reminiscencias a esos diseños futuristas de la década de los 90, pero con un tono de azul más moderno, y nos vienen recuerdos fugaces de ese Ferrari F355 compitiendo contra el Aston Martin DB5 en la película de James Bond, Goldeneye. El interior nos muestra los asientos, el volante y la parte baja del salpicadero forrados en un terciopelo azul con detalles en naranja con una parte superior en azul Klein, el mismo que el del exterior, en fibra de carbono y la palanca de cambios manual, con un diseño y una estética como la de los coches de carreras.
La compañía va a lanzar a la venta 55 unidades en clave de edición limitada, en honor al nombre de la creación original. Ahora bien, el precio final depende de los gustos del cliente, puesto que antes de adquirirlo, te tienes que sentar con la compañía y definir cada punto del diseño, puesto que cada uno irá completamente personalizado, para que el mínimo detalle esté a gusto del usuario y, a poder ser, que ninguno de ellos tenga parecido.